Si estás leyendo este artículo, muy probablemente sea un aficionado a la música, cantante, guitarrista, productor, arreglista o una combinación de todos los anteriores, y su pasión sea crear música que suene increíblemente bien. Puede también que pase momentos de frustración porque no le puede dedicar tanto tiempo como quisiera a esto que disfrutas tanto.
El trabajo, la vida en pareja, ensayos, estudiar, dar clases, tocar en vivo, o ver un partido de fútbol, son cosas que llenan nuestra agenda, de manera que es realmente complicado encontrar tiempo para componer, arreglar, grabar y mezclar. Porque sabemos que hacer música no es fácil.
Pero no se sienta mal, no todo está perdido, hay algo que podemos hacer para «encontrar» más tiempo en nuestras agendas y dedicarlo a crear más y mejor música, y lo mejor de todo, es que no tiene nada que ver con sacrificar ninguna de las otras actividades que también nos gusta hacer, ni el tiempo que necesitamos para descansar y recrearnos.
El exceso de información es nocivo para crear buena música
Nuestro tiempo es limitado, podemos organizar y planear pero casi siempre nos van a faltar horas en el día para poder ejecutar algo más. Es por eso que quiero compartir con vosotros una recomendación que desde hace ya algunos años me ha funcionado a las mil maravillas ¡tenemos que ponernos a dieta! Don Herbert Simon, ganador en 1978 de un premio Nobel en economía, nos dice:
«Lo que la información consume es más que obvio: consume la atención de quien la recibe. Por eso mucha información empobrece la atención y la necesidad de colocar esa atención eficientemente entre la sobreabundancia de fuentes de información que podrían consumirla.”
Lo que dice Simon es cierto, actualmente la facilidad con la que se consigue información es ridícula, y no me mal interpreten, es una verdadera bendición vivir en una época en la que la información está a disposición de quien la quiera adquirir, pero, así como nuestro tiempo es limitado, también lo es nuestra concentración, y si dedicamos tanto tiempo a consumir información, corremos el riesgo de gastar toda nuestra capacidad de concentración y capacidad mental para invertir en nuestra pasión, la música.
La idea no es dejar de informarnos, sino más bien ser más puntuales y focalizados en el tipo de información que queremos recibir, no desperdiciar nuestro tiempo ni nuestra concentración leyendo o viendo, cuanto blog o video nos encontremos.
Cuando apliques esta dieta, podrá ver los resultados de forma casi inmediata. Más tiempo para trabajar en su música, y lo mejor de todo es que podrá ver resultados más satisfactorios al trabajar, debido a que tu capacidad de concentración va a ser mayor, lo que te permitirá tener sesiones de trabajo más productivas.
¿Cómo usar la dieta de bajo consumo de información para conseguir más tiempo?
Es muy simple, cada vez que te sientes a ver un video, a leer alguna revista o blog, sería interesante llevar un control del tiempo aproximado que te tomó esta actividad, hágalo por una semana, y en el último día suma el tiempo que te tomó. Estoy seguro que os sorprenderéis de la cantidad de tiempo que podrían estar invirtiendo en hacer más y mejor música, y eso que estamos midiendo únicamente el tiempo, y no nuestra capacidad de concentración. La capacidad de concentración es más difícil de medir. Si al día hacemos dos sesiones de 15 minutos, en una semana sumaríamos 3 horas y media, imagínate todo lo que podríamos lograr en ese tiempo, además de que como se comenta anteriormente, va a ser un tiempo de calidad, debido a que nuestra mente va a estar despejada.
Aprender, informarse e investigar, son todas actividades indispensables para mejorar en cualquier actividad, el problema es cuando invertimos todo nuestro tiempo y capacidad de concentración en esas actividades, y nos quedamos sin tiempo ni energía para lo más importante, crear música.
¿Que os parece la idea? Recuerden que sus comentarios son bienvenidos, me encantaría saber como haces para administrar tu tiempo para poder trabajar en tu música.
Que tengas una feliz semana llena de mucha música 🙂
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