Como banda o artista, particularmente a los principiantes, es posible que se le pida que toquen en conciertos o shows que simplemente no valen la pena por distintos motivos.
En este post analizamos los 7 factores que te puede ayudar a evaluar si deberías tocar en un concierto o no.
Introducción
Antes de comenzar un nuevo año (o nuevo trimestre, temporada, dependiendo de cuándo leas esto), muchas reflexiones se centran en «Voy a comenzar a ser valorado» y «No estoy trabajando duro para no cobrar nada o por un pago muy bajo”
Los artistas a menudo se preguntan cómo decidir si una oportunidad de tocar en vivo les está pagando lo suficiente, y si eres manager, al llevar a un nuevo artista o banda es una pregunta recurrente.
En esta escala, se analizan todas los factores que ofrece el concierto: si cumple con al menos 3 de ellos, adelante. Si cumple con solo 2 de ellos, todavía hay un posible valor favorable, y lo más probable es que se acabe tocando.
Por otro lado, para oportunidades que solo cumplan uno de los factores, no sería recomendable tomarlos.
▶ Factor#1. Retribución Económica
¿Pagarán un caché razonable?
¿El dinero llegará a mí en su forma física o mediante PayPal, transferencia bancaria electrónica o alguna otra forma legítima de pago?
▶ Factor#2. Diversión
¿El evento o proyecto en cuestión va a ser divertido? ¿Obtendré placer y me hará sonreír? ¿Será algo que merezca la pena recordar para el resto de mi carrera artística o musical?
▶ Factor#3. Comida y bebida gratis
Nadie quiere estar en un evento largo, hambriento y sediento. ¿Puedo obtener agua embotellada por aquí? ¿Hay catering para los músicos? Sinceramente, no nos imaginamos un evento en el que no se cuide a los músicos con, por lo menos, bebida y un catering digno.
▶ Factor#4. Amig@s
¿El evento está siendo dirigido por un buen/a amig@? ¿El organizador/a es una persona de mi círculo con la que también salgo en momentos no laborales? Puedes tomarlo como un apoyo a su causa, de la misma manera que te gustaría que ese amig@ te apoyara a tí. Economía de favores que funcionan, precisamente, entre personas vinculadas en una misca comunidad.
▶ Factor#5. Eventos de 1ª edición
Quizás puede ser la primera vez que se celebra el evento o festival en cuestión, o tal vez es la primera vez que me invitan a participar en dicho festival. ¿O tal vez es la primera vez que te piden que trabaje como asistente de técnico de escenario de un día y en realidad nunca has tenido la oportunidad de usar esas habilidades?
Otra cosa muy importante a tener en cuenta en este tipo de evento: Si hay más ediciones, y la cosa va hacia adelante, ¿contarán contigo para futuras ediciones para o bien remunerarte si fuera posible o darte una nueva oportunidad para que vayas ampliando tu audiencia?
▶ Factor#6. Buenas causas
¿El propósito del evento es recaudar fondos para causas benéficas o para ayudar a paliar algún tipo de problema o situación social? Las causas legítimas y las organizaciones benéficas son dignas de tu tiempo si así lo estimas oportuno.
Igualmente no dejes de valorar la capacidad de atracción de público a ese evento y la posibilidad de realizar networking.
▶ Factor#7. Ventajas adicionales.
Los factores para decidir si actuar o aceptar un proyecto o no, deben completarse con la valoración de todo aquéllo que pueda suponer una ventaja, un complemente positivo a nuestra trayectoria musical y/o profesional.
Aspectos como el networking, compartir con cartel con artistas de renombre, visitar una ciudad en la que no habías estado antes, desempeñar funciones nuevas, participación en workshops, etc.
Son todo ello experiencias y aspectos que enriquecen de alguna manera tu marca y a ti como persona.
☝ Ejemplo Práctico
Imaginemos a una banda independiente a la que se le ofrece un lugar de apertura de último minuto en un gran festival de música que se celebra en su provincia.
No hay pago financiero, pero al tratarse de una banda reciente, sin mucha exposición previa, sería una oportunidad que normalmente no hubieran recibido (7), pudieron conocer a los artistas principales del show (7), tuvieron acceso a un catering para artistas durante los días de duración del festival (3), tuvieron una audiencia mayor de la que nunca hubieran conseguido en alguno de sus conciertos anteriores (2), y se les sufragaron los gastos de gasolina y se le proporcionó alojamiento para dos noches.
Conclusión
No estamos diciendo, de ninguna manera, que en cada situación en la que el concierto o proyecto ofrece otras cosas, pero no hay dinero, deberías tomarlo.
Hay momentos en que tienes que alejarte. Cuando tu amigo comienza un nuevo mini-festival de música y participas en él para cenar gratis y pasar un buen rato, eso es genial. Se reunen 3 factores y todo está bien.
Cuando has estado tocando en el festival de tus amigos durante 6 años, los cabezas de cartel llevan ya 4 años cobrando y cada año llevan a gente más importante y a ti te siguen pagando en catering y diversión, tal vez ya no es suficiente.
Y si en esta situación hipotética, reinterpretamos los factores diríamos que ahora solo aplicaría el factor 1 de comida, porque no es divertido pasar por alto cuando estás apoyando el evento y ayudándolo a crecer estos últimos años y a ti no se te reconoce, valora y paga el esfuerzo.
Recuerda, debes decidir cuántos Factores están presentes y si hay suficientes Factores para que puedas continuar.
Antes de despedir este artículo, recordarte querid@ lector que deben cumplirse en cualquier caso con las Buenas Prácticas de Contratación del Sector Musical que puedes leer aquí.
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