¿Ya No Queremos Guitarras?

El título es impactante, escueto, hasta preocupante. Pero es así: parece que las ventas del instrumento más identificado con el rock han descendido de forma abrumadora.

Se acabó, el rock ya no es el género rey, ya no mueve a las grandes masas. Los ídolos de hoy en día ya no son los virtuosos de la guitarra y Mark Knopfler es un viejo que pertenece al pasado.

En una sociedad cada vez más centrada en la inmediatez, domar un instrumento y llegar a dominarlo, ya no tiene el poder de atracción de antaño. Lo queremos todo ahora, rápido y sencillo. Los estudios caseros, las maravillas del software y algo denominado ‘plugins’ son el nuevo pan de cada día.

Sin ir más lejos, todo apunta a que a la mítica Gibson Guitar Corporation le está llegando la hora. Una deuda de 520 millones y un director financiero que renuncia a su cargo después de menos de un año no prometen mucho. Si esto le pasa a Gibson poca esperanza nos queda… ¿no?

Pongamos el punto de mira en los referentes. Sí, así funciona. Quién lidera es quien manda en cuanto a tendencias, modas, gustos. Cuando los ídolos de la MTV llevaban guitarras y se curraban unos buenos riffs y solos, los jóvenes, con la cara pegada a la pantalla soñaban con ser aquellos seres mágicos que dominaban sus instrumentos con la habilidad de un joven dios. Ahora en MTV encontramos casi que de todo menos guitarristas. El protagonismo se lo llevan el pop, el trap, el hip-hop, la electrónica, el reggaetón y sus mil y una variaciones. Todos sueñan con ser un Avicii, un Kygo, una Selena Gomez, un Maluma…

Es la ley de la selva de toda la vida y se basa en la supervivencia del más fuerte. Los avances tecnológicos no solo los vivimos en comodidades en el hogar, el trabajo o el transporte. También llegan a nuestro ocio, nuestra forma de crear, escuchar y entender la música. Hay quién se aferra al pasado, tal vez, con demasiada desesperación y apunta rotundamente que estas nuevas tendencias “no son música”. No nos desviemos, a lo largo de la historia la concepción de qué es música y qué no lo es ha ido variando considerablemente y nunca hay que llegar al extremo de ser ese snob que se cree con el poder de la verdad absoluta. Los gustos, las tendencias y el arte evolucionan y nosotros tenemos que intentar seguirle el ritmo si queremos encajar y sobrevivir.

En todo este entramado de alerta roja hemos hablado con Juanjo Verdú de Fanatic Guitars (que, por cierto, este año cumplen su 20 aniversario) para que arroje un poco de luz al asunto. Nada más empezar nos aclara: “La situación no es tan dramática, puede que globalmente haya habido cierto decrecimiento en la venta de guitarras eléctricas, pero a nivel de instrumentos acústicos y ukeleles, por ejemplo, vemos que la venta se ha disparado”.

Entonces… ¿a qué se debe tanto revuelo? Según Verdú lo que ocurre se puede resumir en tres puntos: “primero de todo hay más gente vendiendo guitarras, hay más plataformas y eso disipa la concentración de puntos de venta. En segundo lugar, hay mucha venta de segunda mano y, por la calidad de fabricación, los materiales y los controles medioambientales hay una relación muy estrecha entre que un instrumento de hace diez o quince años tenga más calidad que un producto actual. Y el tercer punto, y el más importante, es que el músico clásico, eléctrico, pop o rock es un músico que no está adaptado a las nuevas tecnologías y por lo tanto va dos o tres escalones por detrás del dj que tiene mucha habilidad tecnológica”.

¿Cuál es, pues, el siguiente paso para la industria y los amantes de este instrumento? La única solución es “modernizar y readaptar el concepto de tienda/empresa a lo que hay, no quedarnos estancados. Nosotros no decidimos el negocio que hacemos, sino que es la gente la que nos dicta el negocio que debemos hacer. Tenemos que escuchar más a la gente, al cliente”.