La batería electrónica Roland TD-1KV es sin duda un kit accesible para tocar en casa.
El posicionamiento flexible del pedal del TD-1, la capacidad de actualización y la construcción sólida significan que, a diferencia de otras configuraciones de presupuesto, es poco probable que dañe o supere este kit rápidamente.
Pros: Construcción robusta. Estante que ahorra espacio. Bombo silencioso. Buena calidad para su precio.
Contras: Complicado de configurar y ajustar.
Roland TD-1KV: Elementos
Hubo un tiempo en que comprar una batería electrónica era una inversión tan grande como un set acústico semi-profesional, pero la última década ha sido un período de renacimiento para la batería electrónica.
Con los kits electrónicos ahora más asequibles que nunca, incluso las grandes marcas se están involucrando en el mercado de iniciación, y ahí es donde encontramos uno de los últimos lanzamientos de Roland; la TD-1KV.
Está disponible en dos formatos: La TD-1K, que incluye cuatro almohadillas de goma de una sola zona para toms y caja, almohadillas de crash y ride de doble zona y una almohadilla de charles.
La TD1-KV (el modelo de revisión ) cambia la almohadilla de la caja por una almohadilla PDX-6 equipada con un parche de malla de sensación más realista con activación de doble zona para parche/borde.
Los kits anteriores de Roland para este nivel de precio han tenido pedales de charles y bombo (el TD-1 incluye un trigger de bombo sin batidor) fijados al soporte, lo que significa que la colocación está restringida, pero los pedales del TD-1 son realmente independientes, lo que significa que pueden colocarse donde se quiera y, lo que es más importante, recolocarse en una fecha posterior.
En total, obtienes 15 kits preestablecidos que van desde kits acústicos estándar hasta configuraciones electrónicas y de percusión, además de un metrónomo, la función Rhythm Coach de Roland y 15 canciones para tocar.
Las conexiones incluyen salida de auriculares, entrada auxiliar y USB para conectarse a una computadora.
Roland TD-1KV: Más Especificaciones
Cualquiera que haya desempaquetado un kit electrónico sabrá que construir el estante en primer lugar es la máxima alegría antes de tocar. Sin embargo, es un mal necesario, y el TD-1 no es una excepción.
El soporte principal del bastidor del TD-1KV consiste en un marco en forma de T, y luego todo en modo vertical.
Roland suministra una llave para afinar con el bastidor, ya que casi todos los ajustes y fijaciones se realizan con un perno y tuerca estándar. Se necesitan unos 30 minutos aproximadamente para montarla pero una vez montada, es sorprendentemente resistente y bien distribuida.
Como se mencionó anteriormente, el cerebro TD-1 presenta 15 kits preestablecidos, y si bien hay un ajuste mínimo para la sensibilidad y la panorámica del pad, los sonidos son fijos. Esto significa que si bien no puedes crear kits personalizados, si todo lo que quieres hacer es tocar, puedes hacerlo sin atascarte en retoques.
El cerebro es intuitivo de usar, con un botón grande para cambiar entre funciones (kits, canciones, metrónomo, etc.) y simples interruptores arriba/abajo para seleccionar parámetros dentro de ellos.
En cuanto al sonido, los kits son de buena calidad para practicar pero tampoco son alucinantes. Sin embargo puedes estar seguro que te brindan un conjunto sólido de sonidos básicos en diferentes estilos.
Sin embargo, dado al usuario que Roland se dirige con esta batería electrónica, sería una tontería esperar la misma definición que los kits de gama alta, y los sonidos definitivamente se mantienen (y superiores, en algunos casos) a la competencia.
El puerto USB también transmite MIDI, y controla perfectamente las bibliotecas de sonido de alta calidad como EZ Drummer, Superior Drummer y Steven Slate Drums. Brillante si quieres usar algunos mejores sonidos en el futuro.
Este kit de batería electrónica de Roland cuenta con un pedal electrónico de bombo sin maza, y puedes pensar que esto dará una sensación poco realista como sucede en otros kits que incorporan esta característica, pero este no es el caso, poniendo a relucir el buen hacer de Roland.
Es posible dar dobles golpes rápidos con el bombo sin que el trigger haga el trabajo por tí. Además es silencioso, lo que ayuda a aliviar uno de los mayores problemas con los disparadores de bombo que vibran a través de las tablas del suelo.
El TD-1 no es un acceso directo a un kit electrónico. Está diseñado como una herramienta de práctica para principiantes, y para muchos, el precio podría ser la diferencia entre tener un kit para tocar en casa o no.
Las funciones jam tracks, USB y Rhythm Coach serán bienvenidas para aquellos que recién comienzan también.
Aplaudimos la idea del diseño del TD-1, desde el diseño de rack y almohadilla que ahorra espacio hasta el disparador de bombo que mata el ruido.
Sí, los sonidos son funcionales, más que sorprendentes. El bastidor es resistente, aunque no es el más fácil de ajustar y para tocar en casa sin grandes pretensiones sin duda es una buena y suculenta elección.
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