Las filtraciones son un problema que ha plagado la totalidad del mundo de la música digital.
Según un nuevo informe, el problema ahora está afectando de forma seria las plataformas de streaming, con los impostores publicando música de artistas famosos usando nombres falsos. Algunos de esos operadores están haciendo grandes sumas de dinero.
Según un artículo en Pitchfork, estos impostores están utilizando servicios de distribución de música digital legítimos (agregadores) para poder cumplir con su cometido. Estas plataformas permiten que los artistas independientes distribuyan sus canciones en plataformas de streaming como Spotify y Apple Music, aunque eso abre la posibilidad de que ocurran fechorías.
Si bien es cierto que los servicios de distribución y las plataformas de streaming prohíben subir material perteneciente a otra persona, esto no ha detenido a los impostores de seguir subiendo canciones inéditas de grandes artistas a través de nombres falsos y títulos de canciones inventados.
“Los artistas se enfrentan a la posibilidad de que impostores suban música falsa utilizando sus perfiles oficiales, y que la música robada sea subida usando nombres falsos. Y por supuesto, habrían errores humanos a la hora de detectar estas cargas” dice Noah Yoo de Pitchfork. “Mientras tanto, los fans han encontrado donde pueden encontrar canciones subidas de forma ilegal bajo otro nombre”.
Un impostor anónimo citado en el informe dice que el año pasado Tunecore y Distrokid pagaron juntos casi 60.000 dólares en regalías por canciones pertenecientes a otros. Las canciones fueron reproducidas tanto en Apple Music como Spotify.
Estas canciones le pertenecían a artistas como Lil Uzi Vert y Playboi Carti. Si bien es cierto que las canciones fueron eliminadas de las plataformas, eso no evitó que el impostor recibiera una cantidad de dinero significativa, siendo en algunos casos incluso hasta 10.000 dólares a la vez.
De dónde provienen esas canciones es otro tema interesante. Podrían ser trabajos de espionaje, o ciberataques perpetuados por otros.
En respuesta, un portavoz de Spotify dijo que se toman en serio los derechos de propiedad intelectual muy en serio, y no toleran en lo más mínimo la distribución de canciones no autorizadas para ello. Pero Spotify también añadió que, si bien es cierto que algunas personas están logrando superar las barreras que han puesto, la plataforma está constantemente actualizándose para mejorar esas protecciones.
En otras palabras, esto es un problema que está creciendo mucho más rápido de lo que la industria cree.
Jonathan Gardner de TuneCore declara en medios especializados que, ciertamente no pueden comentar acerca de los casos específicos de infracción, pero la compañía responde de forma proactiva a cualquier comportamiento que se considere como una infracción a los derechos de autor.
“Además de realizar una evaluación exhaustiva de todo el material subido antes de que sea público a cualquier servicio de música digital, también es política de TuneCore el responder de forma explícita a cualquier material que se considere como violación a los derechos de autor, removiéndolo o eliminando el acceso, siendo que dicho material habría sido subido usando el servicio de TuneCore” dijo Gardner.
“Si bien es cierto que no podemos hablar de alguna infracción en concreto, sí podemos decir que TuneCore está comprometido en prevenir que nuestros servicios sean utilizados para tales fines y con ese comportamiento”.
Philip Kaplan, jefe y co-fundador de DistroKid, tampoco comentaría acerca de algún caso específico, pero indico que la compañía había introducido recientemente una nueva tecnología para prevenir este tipo de infracciones citadas en el artículo.
Apple no dio comentarios al respecto.