En estos tiempo que corren donde la tecnología ha tomado nuestras vidas hasta el punto de que el asunto de que los robots trabajaran por nosotros, lejos de ser parte del argumento de una película de ciencia ficción, ya esté encima de la mesa de la Unión Europea, no es muy difícil llegar a plantearse cuestiones sobre la relación de las máquinas con las emociones humanas. Y en este punto donde la música lleva, en parte, la voz cantante.
En este artículo vamos a analizar la relación que existe entre el estado de ánimo y la tecnología, particularmente analizando las experiencias digitales que pueden crear características orientadas hacia el estado de ánimo. Spotify ofrece un ejemplo interesante sobre cómo el mundo digital reacciona ante el estado de ánimo.
Dicho sea de paso los aspectos a considerar para aquellos que estén involucrados en crear experiencias digitales en las cuales el estado de ánimo va a ser un asunto relevante.
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Me saltaré la mayoría de los aspectos teóricos, sin embargo, ofreceré un poco de contexto. Spotify es un ejemplo interesante sobre cómo el estado de ánimo y la tecnología se unen, en parte debido a las listas de reproducción según el estado de ánimo y las opciones de selección que posee la plataforma de streaming; pero también debido a las características centrales de la plataforma: reproducciones ilimitadas, edición, personalización, creación de listas de reproducción y opciones de búsqueda, todas juntándose en una piscina musical enorme, permitiendo a los usuarios acoplar la acción de escuchar música a sus gustos como nunca antes.
Mientras tanto, los creadores de Spotify por sí mismos son claramente conscientes de la importancia del estado de ánimo en tu experiencia. Si bien existen abundantes investigaciones acerca de la relación entre la música y los estados de ánimos (en lo cual no me enfocaré), ninguna de estas investigaciones parece haberse acercado al rol del estado de ánimo en la acción de escuchar música ofrecida a través de las plataformas de streaming.
Entonces, ¿qué rol juega el estado de ánimo en la experiencia de los usuarios de Spotify? ¿De qué forma contribuyen las opciones de navegación de Spotify con esta experiencia?
Spotify y el estado de ánimo de sus usuarios
Indudablemente Spotify juega un rol importante en la vida musical de muchas personas al ser la fuente principal para escuchar música y forman parte de la experiencia de consumo de música aspectos como el largo rango de opciones que ofrece Spotify, tales como las opciones de búsqueda de listas de reproducción para encontrar música nueva, las recomendaciones personalizadas según sus gustos, listas de reproducción que ellos mismos han editado o que han compartido con sus amigos, y seguir listas de reproducción y artistas. La suscripción, en contraste con la experiencia gratis, permite el uso ininterrumpido de Spotify, lo cual resulta en una experiencia más enriquecedora.
Un testimonio en este caso sería:
«Comencé a suscribirme a Spotify hace un año y medio. Originalmente, yo únicamente solía usarlo en el modo de reproducción aleatoria y para buscar artistas regulares que ya yo conocía. Ahora que soy suscriptor, lo uso más para encontrar música nueva o artistas nuevos. También uso Spotify todos los días. Escucho mezclas que yo mismo he creado y también a las que le añado música nueva. Actualmente sigo a “Discover Weekly” y todas las semanas recibo actualizaciones nuevas. Tengo Spotify en mi teléfono y en mi laptop.” – Jane.
Las motivaciones de uso de Spotify están involucradas con su estado de ánimo, la finalidad es tanto alterar como reaccionar a sus estados de ánimo. No obstante hay una diferencia difusa entre el estado de ánimo que se tiene, el estado de ánimo que se desea tener, y el estado de ánimo que está impregnado en una canción o en un género musical.
«Probablemente, solo suelo escoger la lista de reproducción basada en el estado de ánimo en el que estoy. Pero algunas veces, si me siento triste o algo así, entonces probablemente escoja algo que sea más feliz, para así poder intentar cambiar mi estado de ánimo.” – Emma.
“… por ejemplo, hoy estaba escuchando una canción de un cuenco tibetano que estaba categorizado dentro del género de estado de ánimo para relajación y terminé sintiéndome bastante relajada y centrada. Siento que fui fácilmente capaz de caer en un sentimiento de relajación, sentí como si mis músculos se estuviesen relajando con tan solo enfocarme en esas pocas cosas. La música representó y provocó ese sentimiento.” – Jane.
Ese Spotify, el cual permite la regulación del humor, parece intuitivo para los usuarios, pues la música está intrínsecamente conectada al estado de ánimo y a las emociones.
“La música es emoción. Eso es exactamente lo que es. Está dentro de mí, por supuesto. Pero es el sonido y yo, algo así como el sonido y yo trabajando juntos… No estoy muy seguro sobre lo que estoy intentando decir en estos momentos. [pausa larga]… es la música trabajando en mí. No sé como terminar esa oración.” – Lars.
“La música es como una terapia… La única forma con la que puedo calmar mi estrés es a través de la música” – Jorge.
Spotify es entendido como una forma de proveer acceso y navegación de contenido musical que afecta el estado de ánimo. Esto significa que es visto como el envase, en vez de los ingredientes. Así que estas posibilidades basadas en el humor son interpretadas como una parte de la música, en vez de ser consideradas inherentes a la plataforma.
“Spotify es una fuente de música que puedes usar para ajustarla a tu manera, para que así puedas personalizarla. Y cuando se trata de emociones, creo que realmente te da acceso a una gran cantidad de variedad de música. Es como ese tipo de plataforma o de fuente mediante la cual puedes acceder a ciertos aspectos o sentimientos que puedas tener si eres Premium. Todo se arruinaría si tuviese comerciales todo el tiempo, lo interrumpiría” – Sara.
Para los usuarios las listas de reproducción eran la forma predeterminada de escuchar música en Spotify, lo cual significa que es muy inusual escuchar un álbum completo. A continuación puede leerse el testimonio de Sara que se da cuenta de esto cuando habla sobre escuchar discos de vinilo cuando se le pregunta al respecto en una investigación sobre el asunto en cuestión.
“Es interesante cuando… cuando vivía en el apartamento de mi hermana el año pasado, ella tiene un tocadiscos. Coloqué un álbum de Edith Piaf, lo escuché completo de una sola vez y luego lo escuché varias veces. Debido a que tiene dos lados, se puede voltear, lo cual fue interesante porque yo usualmente no escucho un álbum completo, escucho un par de canciones o simplemente le echo un vistazo al álbum y si alguna canción suena bien entonces la añado a una lista de reproducción. De cierta manera puedo decir que observo y organizo cosas rápidamente. Pero aquí escucho el álbum completo. Esa fue una experiencia diferente” – Sara.
Las listas de reproducción basadas en estados de ánimo y editadas por Spotify son ocasionalmente utilizadas ofreciendo un sendero auditivo en el cual las motivaciones basadas en el humor son más explicitas. Los participantes las consideran como formas intuitivas de trascender los géneros, artistas y álbumes con la finalidad de agrupar canciones de tal forma que el oyente logre entrar en el estado emocional deseado.
“La música está de alguna forma basada en el estado de ánimo. Encaja bien cuando se tiene música categorizada de esa forma. Existe mucha emoción en la música. Y esa emoción es usada para distintas cosas, para relajarse o para llenarte de entusiasmo, o, al menos tiene sentido hacerlo en una categoría especial para ciertos estados de ánimo” – Emma.
“Siento que es una forma compartimentada de manejar algo inmanejable debido a que hay tanta música disponible en el mundo y en Spotify. El humor es una forma de compartimentar y de identificar el estado mental, lo cual se puede representar en la música. Considero que Spotify está aprovechando un concepto que es innatamente humano” – Jane.
Esto evita la interrupción de las pistas que no encajan con el estado de ánimo deseado relacionado con la música que desean experimentar, lo cual significa que la música puede ser escuchada a fondo o de forma inconsciente.
“Hay algo sobre el hecho de no tener que pensar en lo que estás escuchando: tener una lista de reproducción que está dirigida a tu estado de ánimo y que también está hecha con anticipación, y así no tener que preocuparte sobre cambiar la canción. Está en el fondo. No tienes que pensar en lo que estás escuchando” – Emma.
Las listas de reproducción diseñadas para concentrarse o para estudiar están incorporadas en esta necesidad. Por ejemplo, la acción de concentrarse es entendida como una mezcla entre un estado de ánimo que necesita un flujo ininterrumpido de música apropiada. Otros ejemplos incluyen trabajar mientras se está en un estado de ánimo triste para obtener una liberación purificadora, manteniendo y reflejando un humor positivo o feliz, o también incluyen la relajación.
“Si. Concentrarse… Para concentrarse es necesario mantenerse calmado y olvidarse de otras cosas, es también necesario colocar esas cosas de lado. No sé si estar concentrado es una emoción pero definitivamente sí tiene emociones que se llevan bien con esto” – Sara.
“Me gustan mucho las listas de reproducción para diferentes estados de ánimo tales como para relajarme o para cenar, y me gusta aún más la música relajante y acogedora. También utilizo este estado de ánimo para meditar y para hacer yoga” – Jane.
Sin embargo, las listas de reproducción para ciertos estados de ánimo no siempre causan el efecto deseado, pues la música que se encuentra dentro de estas listas no necesariamente cumple con los gustos del participante, o con sus expectativas sobre la adecuación de la música para el estado de ánimo deseado.
“De vez en cuando… sabes que puedes escoger una lista de reproducción basada en tu estado de ánimo o en alguna actividad… Pero éstas no siempre funcionan para mí… Considero que están hechas para otra audiencia. No sé cómo decir eso sin sonar arrogante” – Anthony.
“Una vez, invité a unos amigos a mi casa, íbamos a cenar y el género creado para este tipo de cenas era muy alegre para el ambiente y para el evento. Así que puse música tecno. No estaba segura si era la opción correcta para nuestro estado de ánimo” – James.
Sin embargo, las listas de reproducción para ciertos estados de ánimo aportan una ruta para descubrir música nueva fuera de lo que se suele escuchar. Otro beneficio de estas listas está relacionado con alguna situación social, pues en este ambiente es más fácil ponerse de acuerdo que alcanzar un consenso con respecto a los gustos musicales, tanto de artistas como de géneros.
“Sí, creo que las he usado cuando he estado con un grupo de personas y alguien necesita poner música. Algunas veces me siento un poco avergonzado por el tipo de música que escucho así que solamente digo OK, simplemente crearé un estado de ánimo adecuado para fiestas o para tardes para relajarse, e intentaré buscar algunas canciones que conozca, y en el caso de que las hayan entonces solo pensaré que no habrá ningún problema con el resto de las canciones que no conozca puesto que estarán en la misma categoría” – Sara.
Los participantes describen la sensación de encontrar la música apropiada que se acople con su estado de ánimo – o la aparición inesperada de una canción que no encaje con su humor – en términos bastante personificados:
“Cuando encuentro el tipo exacto de música que estoy buscando… por ejemplo, cuando estás cocinando, pruebas la comida y no está exactamente bien, y luego le añades algo más y finalmente sabe bien. Sabes qué es lo que está bien, pero no puedes describirlo. Solamente se siente bien” – Anthony.
“Si coloco alguna lista de reproducción y pienso ¡uy! Supongo que se siente un poco asqueroso, es posible darse cuenta que no está bien. Tal vez lo sienta en mi pecho. Es como una sensación corporal. Ese no es el estado de ánimo en el que estoy.” – Emma
Consideraciones finales
De forma general, el humor es un aspecto vital en el comportamiento de los usuarios de Spotify, y pareciera que ellos escuchan música a través de la plataforma para controlar o para por lo menos reaccionar a sus estados de ánimo. Aún así, el rol del estado de ánimo es normalmente implícito e inconsciente al momento de escuchar música. Las listas de reproducción de ciertos estados de ánimo representan un camino alternativo en el cual éstos están satisfechos tanto explícita como conscientemente, lo cual ocurre en un rango limitado de circunstancias tales como concentrarse, hacer ejercicio y relajarse. Spotify provee una forma pura e intuitiva de navegar sobre los efectos emocionales inherentes a la música, permitiendo que ésta pueda ser accedida y consumida en una forma dinámica, personalizada y con una moda ilimitada que está en continuo movimiento.
Spotify puede verse como una parte del portafolio digital que los consumidores que están utilizando para controlar sus estados de ánimo de forma activa. Sí, de alguna forma somos pasivamente vulnerables a los modos a través de los cuales las experiencias digitales pueden impactar nuestro humor. Pero al mismo tiempo, las experiencias digitales como Spotify nos proveen de recursos estratégicamente cognitivos y afectivos, disponibles en un teléfono inteligente. Tener una fuente ilimitada de música en tu bolsillo es como tener un control remoto por encargo para tu vida emocional. De la misma forma en la cual externalizamos cierta parte de nuestra carga cognitiva a nuestro ordenador (por ejemplo, notas y recordatorios, calculadoras, entre otros), es posible que alguna parte de nuestro estado emocional también pueda ser visto como algo que pueda ser externalizado a la máquina.
Para la industria musical la acción de escuchar música orientada hacia los estados de ánimo es una dinámica interesante y es también un consumo emergente. La escucha de música relacionada con el humor está en conflicto con la música que tradicionalmente es organizada por género musical, artista o álbum. Una lista de reproducción para algún estado de ánimo trasciende estas formas de organización y, de forma contraria, estructura la música alrededor de un estado afectivo asumido. Está en contraste con la reaparición de los discos de vinilo y sus posteriores álbumes LP. Por una parte, existe el streaming de música que está siendo estructurada por algoritmos de búsqueda, por listas de reproducción creadas independiente o socialmente, y por listas editadas por conceptos tales como el humor. Por otra parte, existen los discos de vinilo, donde la experiencia auditiva está controlada por el artista o por la discográfica y que materialmente guía el camino hacia las grabaciones de larga duración.
Finalmente, es interesante resaltar las dificultades relacionadas con el diseño de experiencias para ciertos estados de ánimo. Las listas de reproducción de Spotify que están basadas en este concepto, por ejemplo, no aportan perfectamente las motivaciones del humor generadas por los participantes de este estudio – sino que significó la suma de las opciones que ofrece Spotify además del compromiso activo de los oyentes, lo cual resultó en estados de ánimo que satisfacen el consumo de la música. Diseñar estados de ánimo que involucren interacciones entre humanos y ordenadores requerirá un entendimiento de los aspectos profundos y afectivos de la experiencia del consumidor, lo cual lleva al estudio de tanto ciencias cognitivas como de la filosofía. Llevar a cabo esto puede finalmente revelar oportunidades en este espacio para hacer que las experiencias digitales se sientan más humanas.