Un juez ha desestimado oficialmente la demanda de colusión de Pro Music Rights contra Apple, que, junto con Spotify, SoundCloud, Amazon y muchos otros, fue nombrada en la demanda en marzo de 2020.
Pro Music Rights (PMR) sostuvo en la presentación inicial que los acusados habían «celebrado un acuerdo ilegal, combinación y / o conspiración para sacar a PMR del mercado y fijar precios a niveles infracompetitivos».
- Puedes ver el documento de la demanda aquí.
En julio, PRO, con sede en Florida, eliminó a Napster e iHeartMedia de la demanda, y los logotipos de las entidades aparecieron posteriormente bajo un banner del sitio web de Pro Music Rights que decía «Trusted by Top Companies Worldwide».
Además, PMR y Connoisseur Media, un operador con sede en Westport, Connecticut, de 39 estaciones de radio y activos digitales, llegaron a un acuerdo a finales de octubre de 2020, aunque, como también fue el caso con los acuerdos iHeartMedia y Napster de PMR, los términos del acuerdo puestos a disposición del público no se cumplieron.
Sobre la base de este último punto, la orden que desestima el caso de Pro Music Rights contra Apple no deja claro qué provocó exactamente dicho desarrollo. PMR, que anunció planes a fines de diciembre de 2020 para buscar una cotización directa al estilo de Spotify, no puede comentar sobre el asunto debido a su período de silencio en curso de la SEC.
Pero una documentación legal diferente, presentada a la corte hace aproximadamente una semana, reveló que el fundador de PMR, Jake P. Noch, había entablado conversaciones para llegar a un acuerdo con Spotify como parte de una demanda separada. Pro Music Rights y el sello independiente Sosa Entertainment (que también es propiedad de Noch) impusieron esta denuncia de 1.000 millones de dólares en noviembre de 2019, alegando que Spotify había eliminado sus pistas «por razones anticompetitivas» a partir de 2017, y no pagó regalías por la asombrosa cantidad de 550 millones de streams.
Spotify negó las acusaciones y lanzó una contrademanda alegando que Noch había planeado generar artificialmente cientos de millones de transmisiones fraudulentas en canciones que había diseminado, además de participar en «una campaña de varios años de fraude y acoso.
En la presentación antes mencionada, las partes del caso solicitaron conjuntamente una suspensión de 60 días para poder intentar negociar una resolución de este asunto. Noch dijo en un comunicado que estaba feliz con las conversaciones y esperaba encontrar una excelente resolución para los problemas entre ellos.
Queda por ver si Spotify y Noch llegarán a un acuerdo y aparcan la batalla legal.