La industria de la música cambia muy rápidamente siendo un paradigma en cuanto a los cambios, crisis y disrupciones que pueden azotar a un sector productivo.
En este post podrás ver cómo se han transformado los formatos de grabación a lo largo del tiempo desde principios de la década de 1970. Al final de este artículo podrás ver una animación de la evolución de la industria musical en menos de 1 minutos.
Cada gráfico muestra la contribución de ingresos de varios formatos de música grabada en un año determinado, desde 1973 hasta el presente, según las cifras de ingresos de la Recording Industry Association of America (RIAA).
Cada gráfico representa el 100% de los ingresos totales registrados para el año y se calculó utilizando datos ajustados por inflación de EE. UU.
Como se puede ver, la cantidad de formas en que se ha escuchado música durante las últimas décadas es asombrosa. Para aquellos que tienen la edad suficiente para recordar la era del vinilo original la década de 1970 estuvo dominada por LP de vinilo, EP y single 45, con cintas de 8 pistas, cintas de cassette e incluso otros formatos de cinta.
Esos formatos se llevaron en gran medida a principios de la década de 1980, y las cintas de casete en realidad dominaron durante varios años. Pero a principios de los 80 fue testigo del nacimiento del formato de CD que cambió las reglas del juego, que gradualmente se convirtió en un formato preferido por los fans de la música.
A mediados de la década de 1980, tanto los álbumes en CD como los singles estaban comenzando a establecer su presencia, reemplazando gradualmente los casetes y formatos de vinilo de calidad inferior (aunque, por supuesto, muchos argumentarían que los CD son en realidad inferiores a los LP de vinilo analógicos).
Para cuando los 80 estaban llegando a su fin, el CD era claramente dominante, y apenas comenzaba una expansión de más de una década que impulsaría un auge sin precedentes de la industria de la música.
Sorprendentemente, para cuando llegó el año 2000, el CD representaba aproximadamente el 90% de las ventas totales de música grabada, y la mayoría de ellos eran álbumes completos. En ese momento de la historia de la industria de la música, tanto los LP de vinilo como los casetes se consideraban en gran parte como en vías de salida.
Por supuesto, una cosa que no se muestra en esta animación es Napster, que surgió a fines de la década de 1990. Si bien la fiesta de los CD con mucho dinero en efectivo continuó hasta principios de la década de 2000, los fans estaban cambiando cada vez más a las descargas digitales, generalmente sin pagar por ellas.
En esta era anterior a iTunes Music Store, las descargas pagas aún estaban en su infancia, y la mayoría de los fanáticos de la música preferían la facilidad de los mp3, obtenidos de Napster, Kazaa o posterior, BitTorrent.
Ese fue el comienzo de una proliferación masiva de formatos, comenzando con la descarga de pago (single o álbum), así como con ringtones, ringbacks y plataformas nacientes de transmisión de música.
De repente, la industria de la música grabada se convirtió en el salvaje oeste, con los CD (incluidas las variaciones de gama alta como SACD y DVD-Audio) luchando contra una letanía de otros formatos, legales o ilegales. Los artistas de repente estaban obteniendo ingresos de formatos que antes eran de nicho, como la radio en línea y la radio por satélite, que pagan regalías a través de SoundExchange en los EE. UU.
Ese caos finalmente se enfrió, con plataformas de streaming como YouTube y Spotify comenzando a reemplazar tanto los formatos físicos como las descargas más torpes. Quizás la mayor sorpresa es que los fans de la música estaban dispuestos a pagar por streaming en cantidades masivas, incluso después de casi una década de disfrutar de música gratuita ilimitada.
A continuación puedes ver un gráfico animado creado por DMN en el que poder la evolución:
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