El mundo de la música es infinito y complejo: para ser un buen artista no basta con tener una buena voz y tocar un instrumento, sino comprender los mecanismos del marketing, establecer un contacto fluido con el público, rodearse de un estupendo equipo y grabar en los mejores espacios disponibles.
De todos estos puntos, el proceso que más se suele conocer es el relacionado con la grabación. ¿Dónde ir cuando se tienen varios temas para un disco o se quiere grabar un single? ¿Qué tecnología tiene que tener el estudio de grabación? ¿Cuánto cuesta?
Todas estas preguntas las puede contestar un experto en ingeniería del sonido o el productor de una sala de grabación. ¿Y dónde se encuentran las mejores? Los más famosos del país son los estudios de grabación en Barcelona y otras grandes ciudades, que son espacios donde graban grandes grupos o solistas, y que también disponen de tiempo de alquiler para artistas más desconocidos o grupos amateur.
El estudio de grabación
Evidentemente, lo primero que hay que tener en cuenta es que cada estudio es distinto. Tanto estéticamente como en aparatos y maquinaria. Esto es porque cada uno de ellos se acaba especializando en un tipo de música, va acumulando sintetizadores y otros instrumentos por su propia actividad, etc.
Pese a ello, son muchos los elementos básicos que debe tener un buen estudio de grabación para que el resultado sea un sonido profesional. Entre ellos, cuentan las mesas de sonido, los ordenadores, los micrófonos y sistemas de sonido, el aislamiento sonoro y los instrumentos que se pueden utilizar en una grabación.
Aislamiento
El silencio absoluto es prácticamente un imposible, pero los más profesionales estudios de grabación de Barcelona se acercan bastante a ese objetivo. Y es que los estudios de sonido deben estar totalmente aislados para que el sonido ambiente, el ruido de una moto que pasa por la calle o un estornudo en el espacio técnico no se cuelen en la grabación y la fastidien.
Este tratamiento acústico mejora la captación que realizarán los micrófonos y, por tanto, las pistas con las que se podrá trabajar en el ordenador y en la mesa de sonido.
Micrófonos e instrumentos
Sin duda, un estudio de grabación que se precie debe contar con un amplio catálogo de micrófonos e instrumentos que pueden ser útiles en una grabación.
Los micrófonos han de ser de distintos tipos: ambientales, direccionales… e incluso existen matices dentro de las diferentes marcas que logran matices muy sutiles, pero que pueden convertir una canción cualquiera en un completo éxito.
Respecto a los instrumentos, es necesario que un estudio de grabación tenga los suficientes para solucionar cualquier tema básico: sintetizadores, piano, percusión, guitarras, algo de viento…
Todo ello sirve para que los músicos puedan introducir arreglos que quizá no tenga la canción base cuando se llega al estudio. Disponer de todos estos instrumentos permite probar cosas y desarrollar cualquier nueva idea que tenga en mente el artista o colectivo en cuestión.
Monitores
Los monitores son algo que en el entorno amateur se conoce como altavoces. Son unos dispositivos de salida de sonido que permiten escuchar las grabaciones en una alta calidad para prestar atención a todos los matices.
Esto es algo esencial para el trabajo: los monitores ofrecen un sonido sin alteraciones de tono ni ningún tipo de coloración. Se podría decir que es un sonido ‘literal’, que es con el que los ingenieros y los productores trabajarán en la producción.
Mesa de sonido, ordenadores y hardwares
En la parte más técnica del estudio de grabación se encuentran los ordenadores, la mesa de sonido y los hardwares de programas de grabación.
Todos estos elementos están dispuestos para conseguir las pistas que graban los artistas, así cómo mezclarlas y realizar la producción: bajar sonidos, empastar las voces, etc.
¿Cuánto cuesta grabar un single o un disco?
La gran pregunta para las personas que se enfrentan por primera vez a la grabación de un disco es ¿cuánto cuesta meterse al estudio de grabación? Esta respuesta también dependerá del estudio, su fama y su profesionalidad.
El consejo es apostar siempre por los mejores estudios de grabación, ya que, aunque puedan ser más caros, al final el resultado es mucho más interesante.
Respecto al precio, los estudios de grabación generalmente se alquilan por horas y por gasto de recursos. ¿Solo se necesita grabar una canción con voz y guitarra? El precio será uno. ¿El objetivo es grabar un disco y se necesita un productor, músicos que hagan arreglos, entre otros? El precio, evidentemente, será otro.
En España, la media entre los estudios más amateur y los profesionales, es de un gasto de 150 euros por hora de grabación. Esto incluye la grabación y la producción, además de algunos arreglos incluso.
Además, algunos estudios ofrecen ‘paquetes completos’ que incluyen la realización de todo el proyecto y cuyos precios están en torno a 6000 euros.
¿Y después, qué?
Una vez que se ha grabado el disco, el músico o el grupo todavía tienen una serie de opciones que tener en cuenta. ¿Conviene sacar un disco físico o es mejor lanzar el proyecto en plataformas digitales?
Esta decisión es una novedad de los últimos años, cuando se ha popularizado el consumo de música en streaming. La decisión dependerá, sobre todo, de la proyección del proyecto y del presupuesto.
Si se trata de una iniciativa musical pequeña, que no tiene pretensiones de conquistar el mercado o además no se cuenta con demasiado presupuesto, quizá la mejor elección sea apostar por los formatos digitales.
Esto cambia radicalmente en el caso de grupos que quieran vender su trabajo en discos físicos en sus conciertos o en tiendas de música. En estos casos, siempre se recomienda la publicación del disco.
Todos estos consejos y pasos son los que siguen todas las personas o grupos que quieren meterse a grabar su música. Después de buscar estudio de grabación en Barcelona u otras grandes ciudades, solo hay que trabajar para lograr un buen producto y darle al play para que suene la música.