¿Te sientes nervioso? ¿El trabajo te genera estrés? ¿Estás pasando por un momento difícil y tienes ansiedad? Si es así, la música terapéutica contra el estrés puede ser la solución a tus problemas. Esto se debe a que la música tiene efectos positivos en la salud del ser humano. De hecho, se está utilizando como tratamiento para enfermedades como el Alzheimer, como método para potenciar el desarrollo creativo de los niños o como fórmula para dormir mejor.
Estamos acostumbrados a escuchar música desde que nacemos. Podemos escucharla en las nanas que cantan las madres a sus hijos o en la cola del supermercado. Pero la música, no solo es la banda sonora que acompaña nuestra vida, también es una forma de terapia que cada día tiene un mayor número de seguidores. Por este motivo, cuando una persona tiene estrés es habitual que acuda a la música para calmar esos nervios de forma rápida y eficaz.
¿Qué es la musicoterapia?
La musicoterapia es un tipo de terapia que emplea música para obtener beneficios en la salud y el bienestar de una persona. La música ayuda a activar todas las áreas del cerebro para que el estado emocional, físico y cognitivo del ser humano funcione correctamente.
Por este motivo, esta experiencia sensorial es utilizada en métodos de rehabilitación, en centros educativos y en cursos para alcanzar un bienestar personal óptimo. Sin duda, es una excelente técnica para ayudar a la persona a superar trastornos o a recuperar la calidad de vida.
La música está presente en numerosas actividades del día a día. Los expertos en musicoterapia emplean la música de múltiples formas para tratar trastornos psicológicos, rehabilitar a personas con adicciones, potenciar el aprendizaje o mitigar el dolor en determinadas enfermedades.
De la misma forma, la música es utilizada en neonatos para desarrollar la expresividad y el sentido del oído en el bebé. Concretamente, se han realizado numerosos estudios que indican que la música de Mozart tiene múltiples beneficios en el desarrollo intelectual y creativo del recién nacido.
¿Por qué la música terapéutica ayuda a calmar el estrés y los nervios?
Cada día, más personas se decantan por la música terapéutica para alejarse del estrés que produce la jornada laboral. Esto se debe a que la música genera una profunda conexión con el estado emocional de la persona.
Por este motivo, la música se utiliza para calmar el llanto de un bebé, sobrellevar con éxito las tareas diarias o dormir mejor. El estrés y los nervios pueden ocasionar en las personas problemas de salud importantes como la ansiedad, el insomnio o la aparición de alteraciones dermatológicas y dolencias musculares, entre otras afecciones.
Muchas personas deciden hacer uso de fármacos que crean adicción para reducir el estrés, la ansiedad y los nervios. Afortunadamente, gracias a numerosas investigaciones que salen a la luz, cada día más personas conocen el poder terapéutico de la música.
Y es que esta forma de hacer terapia ayuda a mantener el estrés a raya de una manera saludable. Por tanto, si te encuentras en una etapa de tu vida difícil, estás estresado por el trabajo o te sientes nervioso por alguna razón, la música puede ser tu mejor terapeuta.
¿Qué características debe tener la música para eliminar el estrés?
Las personas reaccionan de distintas formas ante diferentes estilos musicales. A pesar de esta subjetividad, numerosos expertos en musicoterapia han coincidido que la música que reduce el estrés debe tener ritmos positivos. Esto es imprescindible para que el estado de ánimo de una persona cambie. De esta forma, la persona podrá reducir la ansiedad, el estrés e incluso el cansancio que genera una larga jornada laboral.
Además, es importante destacar que las melodías con tempo lento son las mejores para conseguir la relajación deseada. Concretamente, la música que tiene un tempo de 55-65 pulsaciones por minuto es la más indicada para meditar y encontrar la paz en nosotros mismos.
Por otra parte, también es necesario poner atención a la armonía, ya que según numerosos estudios la música que logra reducir el estrés tiene una progresión melódica ascendente. Así, la armonía ayuda a recuperar el bienestar personal y el estado de ánimo positivo.
Otros aspectos a tener en cuenta a la hora de elegir la música adecuada
Para que la música tenga un efecto relajante y reduzca el estrés, es importante que la melodía no tenga letra. De esta manera, la persona podrá poner toda su atención en la sensación que le produce la música y no en la letra que tenga la canción.
Y a pesar de que hemos dicho los componentes que debe tener la música para ayudar a disminuir el estrés, es importante tener en cuenta las preferencias musicales de cada uno. ¿Esto que quiere decir? Pues que, al fin y al cabo, son recomendaciones y que debemos elegir aquella música que nos eleve el ánimo y nos haga sentirnos bien con nosotros mismos, aunque tenga letra o un ritmo más acelerado.