Informe UNESCO. Primer mapa global de las industrias culturales y creativas

Las industrias creativas y culturales (ICC) generan 2250 mil millones de dólares de ingresos y 29,5 millones de puestos de trabajo en todo el mundo

Los ingresos generados por este tipo de industrias superan a los de la industria de las telecomunicaciones (1570 mil millones) y sobrepasa el PIB de la India (1900 mil millones de dólares). Dentro de la cantidad total, los tres agentes que generan más ingresos son la televisión (477 mil millones), las artes visuales (391 mil millones), y los periódicos y revistas (354 mil millones). Además, con los ya mencionados 29,5 millones de empleos, estas industrias dan trabajo al 1% de la población activa mundial. En este aspecto, los tres principales empleadores resultan ser las artes visuales (6,73 millones de puestos de trabajo), los libros (3,67 millones), y la música (3,98 millones).

El mundo cultural y creativo es multipolar

Las cuentas de la región de Asia y el Pacífico muestran unos ingresos de 743 mil millones de dólares (lo que representa el 33% de las ventas globales de las ICC) y 12,7 millones de empleos (el 43% de los empleos generados por las ICC en todo el mundo). El mercado asiático está dirigido por una enorme población, y esta región acoge a varios líderes de estas industrias, como es el caso de Tencent, CCTV yYomiuri Shimbun. Europa y Norteamérica son el segundo y tercer mercado de ICCs respectivamente, seguidos de Latinoamérica y África (incluyendo Oriente Medio). No obstante, las industrias creativas y culturales están experimentando un gran desarrollo en estas dos regiones. Hay que destacar que, aunque el desarrollo de estas industrias en las distintas regiones se produce de manera simbiótica, el impulso de cada una de ellas se ha llevado a cabo por separado.

Los contenidos culturales y creativos dirigen la economía digital

Las ICC son la locomotora de la economía online, contribuyendo en 2013 con 200 mil millones de dólares al total de las ventas digitales. El contenido cultural y creativo también fortalece las ventas de dispositivos digitales, que alcanzaron un total de 530 mil millones de dólares en ese mismo año. Los bienes culturales digitales son, de lejos, el gran recurso en términos de ingresos de la economía digital, llegando a generar 66 mil millones de dólares en ventas al consumidor en 2013 y 21,7 mil millones en ingresos de publicidad por parte de medios online y webs de streaming gratuíto.

La producción cultural es joven, inclusiva y emprendedora

Las actividades creativas contribuyen significativamente en generar puestos de trabajo para los jóvenes, y las carreras profesionales en las ICC están abiertas prácticamente a personas de todas las edades y formaciones. En Europa, este sector da empleo a más trabajadores de entre 15 y 29 años de edad que cualquier otro. Del mismo modo, las industrias creativas tienden a favorecer la participación de la mujer en las mismas en mayor grado que en las industrias tradicionales. Las estadísticas compiladas por el gobierno de Reino Unido mostraban que, en el año 2014, más del 50% de los trabajadores del sector de la música eran mujeres, mientras que esta cifra se reduce a un 47% en el caso de la población activa en general). Además, los procesos de creación son llevados a cabo por pequeñas empresas e incluso individuos, lo cual permite que los trabajadores sean más ágiles e innovadores. Más de la mitad (53%) de los desarrolladores de juegos canadienses se consideran trabajadores independientes, y en Estados Unidos, resulta 3,5 veces más probable que los artistas sean trabajadores por cuenta propia que el resto de trabajadores en general.

La cultura aumenta el atractivo de las ciudades

Una infraestructura cultural de clase mundial es un gran catalizador para el desarrollo de las ciudades. Construir un museo a menudo ofrece oportunidades para atraer grandes proyectos de desarrollo urbano, así como para fomentar una nueva «marca de la ciudad» alrededor de las industrias culturales y creativas. La creación de este tipo de proyectos a modo de «buque insignia» realza el atractivo de las ciudades de cara al turismo, al talento y a trabajadores bien cualificados. Bilbao, en el País Vasco de España, es en estos momentos un gran icono de cómo la cultura ha dirigido una regeneración urbana, ya que la construcción del Museo Guggenheim llevó a la creación de más de 1000 puestos de trabajo a jornada completa, y el número de turistas que visitan la ciudad se ha multiplicado por ocho. Igualmente importante es el hecho de que las ICC hacen que las ciudades sean más habitables, produciendo centros de actividad en los que los ciudadanos fomentan sus relaciones personales, creando una entidad local y permitiendo una mejor realización como individuos.

La economía informal es una gran reserva de puestos de trabajo

En el año 2013, las ventas informales (entendiendo como estas aquellas no declaradas o pertenecientes a la economía sumergida) estimadas llevadas a cabo por las ICC en países emergentes ascendieron al total de 33 mil millones de dólares, creando además 1,2 millones de empleos. Las artes escénicas resultaron ser las que generaban más empleos dentro de esta economía sumergida, proporcionando actuaciones musicales y teatrales de manera no oficial (actuaciones en la calle, festivales y conciertos que no pagan derechos de autor, actuaciones privadas en bodas y funerales, etc.), las cuales son a menudo ofrecidas de forma gratuita. En el caso de África, estas actuaciones son a veces financiadas por patrocinadores individuales.

Aprovechando un mundo más creativo

Promoción de derechos de autor: Si queremos que los autores y creadores puedan continuar su labor y promuevan la diversidad cultural, deben ser compensados de manera justa por el uso de sus trabajos. El actual fracaso al recompanser debidamente a los autores está limitando los ingresos de las ICC y reteniendo su crecimiento y capacidad para generar nuevos empleos.

Buscar el crecimiento. A medida que las compañías tratan de alcanzar las escalas necesarias para explotar sus mejores ideas a través del mercado global, el término «consolidación» ha vuelto a ponerse de moda. El informe de 2015 de la consultora Ernst & Young denominado «Barómetro de la Confianza del Capital» sobre medios de comunicación y entretenimiento, muestra que el 50% de las compañías pertenecientes a las ICC esperan tener nuevas adquisiciones en los próximos 12 meses.

Perseguir una expansión global. Los mercados consolidados permanecen como los más atractivos para las empresas y organizaciones de las ICC a la hora de invertir. Sin embargo, China y la India son mercados emergentes elegidos por muchos ejecutivos, debido principalmente a su fuerte crecimiento y a su gran potencial a largo plazo.

Equilibrar la monetización online. Los actores de las ICC se enfrentan a dos dificultades: intentar convencer a los consumidores de que paguen por algo a lo que posiblemente puedan tener acceso de manera gratuita, y obtener una cuota justa del valor generado por el contenido cultural, lo que ha sido enormemente capturado por intermediarios online. Este problema de una cadena de valor sesgada a favor de los intermediarios de internet necesita ser dirigido por acciones políticas que vayan más allá de las fronteras entre países, de tal forma que internet pueda convertirse en un lugar de comercio justo para los creadores y sus obras.

Alimentar el talento. El talento es la sangre que fluye por las venas de las industrias culturales y creativas. Según el economista urbano Richard Florida, la «clase creativa», incluyendo diseñadores, artistas y trabajadores creativos cualificados, actúa como un motor de innovación y desarrollo urbano, estructurando las redes y ejes creativos del desarrollo económico, social y cultural de sus ciudades y regiones de origen.

Mapa global de las industrias culturales y creativas

Fuente: Informe: «Tiempos de cultura, el primer mapa mundial de las industrias culturales y creativas», UNESCO.

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