¿Te gustaría elevar el nivel de satisfacción personal y profesional, permitiendo el dominio absoluto de los miedos, inseguridades y frustraciones que en ocasiones sientes que bloquean tu trayectoria musical?
¿Sueñas con tener éxito?
Si la respuesta a ambas preguntas es “si”, a continuación te propongo 5 grandes cuestiones que te ayudarán a conseguirlo…»
1. ¿Para qué quieres tener éxito?
¿Te has parado a pensar qué es el éxito para ti? ¿Tu concepción de éxito es la misma para ti que para tu entorno? ¿Hacia qué éxito te diriges?
Hay muchas personas que no saben lo que quieren en la vida y se pasan años y años sin encontrar su camino. Sin embargo, si deseas triunfar debes enfocar tu objetivo, visualizar tu éxito y andar hacia él día tras día.
Te invito a reflexionar cada mañana sobre la siguiente cuestión:
¿Qué puedo hacer para que hoy se convierta en un gran día?
Las ganas de ganar son importantes, pero las ganas de prepararse son vitales.
2. ¿Cómo de comprometido estás con tu proyecto?
¿Estoy realmente enfocado(a) en mi meta, o me estoy distrayendo en otras cosas? ¿Esto que he considerado el éxito es realmente lo que quiero?
Me gusta poner el ejemplo de la máquina de vapor. Cuando el agua está a 99º C de temperatura, se encuentra en estado líquido y no tiene suficiente fuerza para mover nada. Sin embargo, cuando alcanza los 100 ºC, se convierte en vapor y es capaz de mover los pistones más duros o la maquinaria más pesada. En tan solo un grado, está la fuerza del agua.
Por eso si te pregunto cómo de comprometido estás con tu proyecto, no vale con que digas: bastante. Tienes que estar comprometido al 100%, porque si no, no dispondrás de fuerza suficiente para logarlo. Mucha gente abandona al 99% porque no sabe lo importante que es ese grado de más.
Así que, ama lo que haces, comprométete y lucha por ello hasta el final, porque como dijo Babe Ruth “Es difícil superar a una persona que nunca se rinde”
3. ¿Dónde reside tu mayor talento?
Lo que tú tienes, muchos lo pueden tener…pero lo que tú eres, nadie lo puede ser.
Si no eres consciente de tus talentos y habilidades, de lo que te hace vibrar en la vida, estarás desperdiciando una gran ayuda para conseguir el éxito.
Todas las personas tienen uno o varios talentos que, combinados con su carácter, hacen una persona única e irrepetible. Desde el coaching ayudamos a descubrir y desarrollar esos talentos para que el potencial de cada persona se desarrolle lo máximo posible.
¿Quieres saber dónde reside tu mayor talento? Empieza reflexionando sobre las siguientes cuestiones…
Cuando eras pequeño y te preguntaban ¿qué quieres ser de mayor?, ¿Qué respondías?
¿A quién admirabas o admiras? ¿Te gustaría estar en su lugar? ¿Cómo te hace esto sentir?
¿Qué actividades te gustaba hacer cuando eras niño? ¿Y cuándo eras adolescente? ¿Y ahora?
De todas estas cosas, desecha aquello que no te hace vibrar, aquello que no te motiva y luego busca puntos en común entre el resto de sueños y actividades que te han ido viniendo a la cabeza. ¿De qué te das cuenta?
Si puedes soñarlo, puedes lograrlo” (Zag Ziglar)
4. ¿Qué vas a hacer para conseguirlo?
¿Has pensado ya cuál es tu plan de acción? ¿Cuál es tu siguiente paso?
El primer paso no te lleva a donde quieres ir, pero sí te saca de dónde estás. Crear una estrategia para alcanzar el éxito suele resultar complicado.
El coaching te ayuda a comprometerte con determinadas acciones y fechas y así, alcanzar pequeñas metas que te acerquen al objetivo final.
Estas pequeñas metas son fundamentales y para ello, es necesario que tengas presente tus talentos, fortalezas y debilidades de tal forma que tu plan de acción se adapte completamente a ti y sea efectivo.
Así que, ¿qué puedes hacer que no estés haciendo ya para lograr tu éxito? ¿Y qué más?
¿Cuándo vas a hacerlo?
Porque no es suficiente idearlo, no es suficiente plantearlo, lo imprescindible es llevarlo a cabo.
“La vida es muy corta para las escusas. Define tus metas y ve tras ellas.” (R. White)
5. ¿Con quién lo vas a celebrar?
Seguramente a lo largo de los años has conseguido éxitos importantes y has alcanzado metas que te parecían muy lejanas. Pero, ¿cuántas veces te has parado a celebrarlo?
¿Has pensado alguna vez qué beneficios te aportaría celebrar tus logros por pequeños que te parezcan?
Al celebrar cada triunfo, tomarás conciencia del aprendizaje que te ha llevado a ello y te ayudará en futuras ocasiones. Además, compartiendo tu felicidad aumentará tu fuerza para conseguir otras metas y esto, te permitirá focalizarte en el éxito en lugar de en el fracaso.
Jamás esperes un resultado positivo teniendo una actitud negativa. Recuerda que no siempre podemos elegir la música que la vida nos pone, pero podemos elegir cómo la bailamos!!
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