Tocan en la Tonhalle y la Deutsche Oper am Rhein, hacen apariciones especiales en las metrópolis de Europa y Asia, brillan con grandes sinfonías y un sutil sonido de conjunto, hacen música para niños y jóvenes y hacen campaña por la promoción de jóvenes músicos: la Orquesta Sinfónica de Düsseldorf es el corazón musical de Düsseldorf y al mismo tiempo embajadores de nuestra ciudad en todo el mundo.
Y representan un capítulo fascinante de la historia viva de la ciudad que se remonta a más de 400 años. En 1585, una orquesta de la corte de doce personas tocó en la “Gran boda del príncipe Jülischen” entre el duque Johann Wilhelm y Jacobe von Baden.
Cien años después, en la época de “Jan Wellems”, la vida musical de Düsseldorf había alcanzado el formato europeo gracias a la orquesta de la corte. Músicos célebres como Agostino Steffani, Arcangelo Corelli y Georg Friedrich Handel trabajaron con el conjunto.
La orquesta experimentó su segundo apogeo en el siglo XIX: con el establecimiento de Städtisches Musikverein en 1818, una cultura orquestal emergió nuevamente en Düsseldorf, que atrajo a grandes como Felix Mendelssohn Bartholdy y Robert Schumann.
En su (breve) mandato como directores musicales, ambos establecieron estándares que deberían dar forma a las generaciones. La orquesta se volvió realmente urbana en 1864. Düsseldorf, que mientras tanto se había convertido en una metrópoli económica, ahora podía adornarse con la segunda orquesta comunal más antigua de Alemania después de Aquisgrán.
Como resultado, la Sinfónica se convirtió en una de las principales orquestas de la república. Entre guerras, directores como Karl Panzner, Hans Weisbach, George Szell y Jascha Horenstein representaban una programación ambiciosa y de alta calidad. Bajo los nazis, Hugo Balzer siguió una política programática oportunista, y la orquesta fue la orquesta central en el Reichmusiktage en 1938 y 1939.
Pero después de la reconstrucción, Heinrich Hollreiser y Eugen Szenkar lograron rápidamente llevar la orquesta de nuevo a un nivel internacional. En 1955, tuvo lugar el matrimonio de ópera entre las casas de Düsseldorf y Duisburg, lo que supuso muchas más exigencias para el director. El resultado fue la separación de los puestos principales entre ópera y concierto.
En 1987, la Sinfónica de Düsseldorfer recibió por primera vez un director artístico en Peter Girth. Él y sus sucesores Freimut Richter-Hansen, Vera van Hazebrouck y Michael Becker lograron expandir significativamente el espectro de actividad de la orquesta y consolidar su posición en la ciudad.
Bajo la dirección artística del dúo de directores formado por Adam Fischer (primer director de concierto) y Alexandre Bloch (director invitado principal), los Symphoniker esperan un futuro que esté a la altura de su reclamo y obligación como «Orquesta de Düsseldorf». en el sentido más moderno.
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