Hay un momento en la vida de toda banda o proyecto musical que decide tomarse más en serio su carrera y pueden querer contratar a algún profesional para que les ayude en algún área. Como por ejemplo un publicista, periodista, diseñador, manager, etc, etc.
Por ejemplo en el caso de un publicista al que bandas solicitan servicios de relaciones publicas. La mayoría de las bandas suelen ser nuevas en esto, no tienen ni técnicas de gestión ni sellos en los que apoyar su trabajo de gestión, y tampoco una tienen idea clara de lo que es la publicidad o qué es exactamente lo que necesitan, y esto, es comprensible.
Preguntan acerca de los planes de precios, lo que implica los servicios, por ejemplo: ¿Qué tipo de paquetes ofreces? Y esto es todo lo que deberían hacer, tampoco hay muchos más… Sin embargo, la mayoría de las veces, si se trabaja con bandas que si tienen conocimientos de gestión y management, asi como con bandas con años de experiencia y múltiples álbumes.
A pesar de todo, siempre hay bandas muy «originales» y van soltando perlas de las cuales vamos a exponer a continuación algunas muestras. Si a tí también te ha pasado puedes comentar tu caso y tratar de que otras bandas se enteren para cosas así no sucedan tan a menudo…
¿Qué ofreces por 200 euros?
Cuando por ejemplo un publicista o una agencia de relaciones públicas recibe un correo electrónico preguntando que tipos de planes ofrecidos por 200 euros, queda claro que quien pregunta no tiene mucha idea del negocio de las relaciones públicas. Las relaciones públicas no resultan baratas,se emplea mucho tiempo y ello, conlleva un precio. Lo mismo si hablamos de calidad un profesional de reconocido prestigio. Cuando alguien propone algo así, está indicando que la banda es demasiado joven para tener incluso una estrategia de relaciones públicas, y que necesitan crecer y madurar en muchas áreas, incluyendo la comprensión del negocio.
¿A qué acuerdo podemos llegar?
Este tipo de correos pueden resultar maleducados y presuntuosos, ya que alguien que no conoce al receptor del mensae ni su trabajo, está ofreciendo llegar a un acuerdo sobre los servicios. El profesional puede pensar que si es bueno en lo que hago ¿por qué debo hacer un descuento? Si quieres regatear, puedes, pero sacarte tarjeta roja, y por lo general hace que la conversación no llegue a buen puerto.
Llegaremos a ser grandes… así que ¿por que no nos ayudas a empezar?»
Por otro lado, existen bandas, que me piden algún tipo de favor, porque ellos se han considerado la mejor banda del mundo. Lo cierto es que cada banda quiere ser la más grande del mundo, y la mayoría de las bandas piensa de esta manera. No tiene nada de malo confiar en uno mismo y ser ambicioso. Sin embargo, pedir a alguien con una experiencia dilatada en un sector difícilmente trabajará gratis, de hecho, resulta insultante. No funciona asi en la vida, tampoco en el negocio de la música.
Un correo electrónico sin información
Un correo electrónico solicitando los servicios de un relaciones públicas por ejemplo o de cualquier otro profesional sin ningún información en él. Ejemplo: ”somos una banda y queremos saber lo que cuestan sus servicios” No puede ser tomado en serio, además la mayoría de la gente que trabaja en este negocio, no van a investigar sobre ellos, y hacer ese trabajo.
Cadenas de correos electrónicos «complicados»
Otra modalidad es el envío de varios correos con demasiada información en lo que esta se manda de forma fragmentada sin orden o coherencia (Un buen press kit soluciona esto chicos…)
Mejor un intercambio de correos concretos que muchos con una información dispersa, ya que a veces a pesar de un cruce de emails, el posible acuerdo se desvanece y se detiene por no haber filtrado la información correctamente. Así que, yo recomendaría hacer una comunicación eficaz y eficiente. Todo el mundo está ocupado, y sin una dirección clara, puede convertirse en nada .
Y para terminar, ¿qué me decís del de «Escucha mi nuevo trabajo»?.
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(Artículo realizado por Eva Alcojor para PromocionMusical.es)
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