La gran mayoría de los hogares con televisión en Estados Unidos tiene múltiples tecnologías disponibles que da a estos consumidores una elección significativa de opciones de visualización y escucha, desde videoclips, películas, series, programas de TV, etc.
Como resultado de esto, el tiempo y la atención de los consumidores en todos los medios de comunicación está en un flujo constante de movimiento. El aumento de la visualización de vídeos en plataformas digitales tanto para contenido digital nativo como para contenidos de televisión de producción propia, así como el surgimiento de vídeo basado en suscripción bajo demanda (SVOD) en todas las plataformas, están cambiando la forma en que consumimos los medios de comunicación tradicionales.
En este entorno donde el comportamiento de la audiencia es cambiante, la medición de éstas es clave para permitir su comprensión para que la industria de la publicidad pueda informarse en un mundo donde los medios están cada vez más fragmentados. En consecuencia, la medición de audiencias transformará dramáticamente la manera de capturar con precisión y valorar la audiencia total.
La tecnología engendra tecnología
Más del 40% de los hogares estadounidenses tenían acceso a un servicio de SVOD a fecha de noviembre de 2014, y el 13% de los hogares afirma disponer de múltiples servicios de streaming. Aquéllas viviendas con servicios de suscripción de streaming tienen tanto una inclinación por la tecnología de TV conectada y muestran un mayor uso de estos dispositivos con casi 50 minutos más que una casa normal del TV.
Por si parte los servicios de video bajo demanda bajo suscripción están dando opciones a los consumidores para gastar dinero en contenido.
A medida que la economía de Estados Unidos continua buscando la manera de resurgir de la actual recesión, los consumidores continúan alimentando el crecimiento de servicios de vídeo bajo demanda basados en suscripción (SVOD).
De acuerdo con el más reciente Total Audience Report de Nielsen, en el cuarto trimestre de 2014, el 41% de los hogares estadounidenses tienen acceso a un servicio de SVOD.
La composición multicultural de estos hogares, en cuanto a raza y origen étnico en SVOD es diferente al de otros tipos de hogares. Por ejemplo, entre los hogares con SVOD, el 71% de ellos son blancos, el 12% son hispanos, 10% son de color negro y el 5% son asiático-americanos. Sin embargo, la distribución es muy diferente al de los hogares que no tienen banda ancha donde un 56% de las viviendas son de raza blanca, el 18% son hispanos, 22% son de raza negra y sólo el 2% son asiático-americano.
El informe encontró que la penetración en ambos casos a Internet de alta velocidad y acceso a SVOD están fuertemente relacionados con los ingresos. De hecho, alrededor del 13% de los hogares cuentan con múltiples servicios de streaming en sus hogares y casi la mitad de los hogares que cuentan con acceso a SVOD tienen un ingreso familiar anual de más de $ 75.000, mientras que dos tercios de los hogares sin acceso a banda ancha tienen ingresos familiares anuales de menos de $ 40,000.
Dunia Turrill, SVP Insights de Nielsen comenta que «Al comparar los hogares con acceso a servicios de streaming por suscripción respecto a una casa típica con TV, los hogares con banda ancha y sin SVOD e incluso las casas sin banda ancha, se puede apreciar como las casas con acceso a SVOD realmente tienden a hacer uso del servicio ‘all in’ en los dispositivos que están utilizando a través de sus televisores tradicionales» y añade tambien que «Desde los DVR hasta el uso de consolas para videojuegos, estas casas, debido tal vez a su nivel de ingresos, adoptan estos dispositivos a un ritmo mucho más alto. La tecnología engendra la tecnología «.
El informe encontró que los hogares con servicios de suscripción a streaming tienen tanto una inclinación por la tecnología de la TV conectada y muestran el mayor uso de estos dispositivos con casi 50 minutos más al día que una casa normal de TV. Además, estos hogares tienen un promedio de 10 minutos más al día de ver la televisión en diferido y el doble de tiempo dedicado al uso de un dispositivo multimedia (como Apple TV y Roku) que una casa normal del TV.