Industria musical y VR. Innovación en videos musicales

Los músicos han experimentado con la realidad virtual más que nadie. La mayor parte de los primeros proyectos van por uno de estos dos caminos: o alguien coloca una cámara en el escenario durante un concierto para que puedas ver el show desde la extraña perspectiva de un miembro de la banda que no toca ningún instrumento y simplemente está ahí o la banda toca colocada en círculo alrededor de la cámara, como si fuera un concierto privado para ti. Si esto cuenta como realidad virtual o si es sólo un “vídeo en 360” dependerá de a quién le preguntes. Pero todo el mundo lo está haciendo: Coldplay, Avicii, U2, Bjork, Paul McCartney, Taylor Swift, el reparto de “El Rey León” de Broadway… Un ejemplo especialmente bueno es el de “Crown” de Run The Jewels.

Puedes ver en nuestra lista de reproducción la selección de vídeos en 360º 😀

Algunos otros van un paso más allá, usando el poder inmersivo de la realidad virtual para hacer más interesantes sus vídeos musicales. El vídeo para “Hey, No Pressure” de Ray Lamontagne te lanza a un caleidoscópico viaje de ácido por una pista de baile donde los bailarines giran y las luces destellan al ritmo de la canción. A principios de este año, Dawn Richard lanzó una loca space jam en realidad virtual, llena de hologramas y ambientes intergaláctico

Sin importar el género o la sensación, todos esos proyectos tienen una cosa en común: no te cantan una canción tanto como te lanzan en medio de una. “En los vídeos musicales tradicionales” dice “Chris Milk, un célebre director de vídeos musicales convertido en fundador en la compañía de realidad virtual Within, “el espectador está fuera de la experiencia, mirándola. En la realidad virtual la gente está justo en medio de ella.” Los vídeos con narrativa e historias – como el épico vídeo de 13 minutos para “Thriller” de Michael Jackson por nombrar uno que todo el mundo mencione cuando sale el tema – no funcionan con la realidad virtual. Aún no. Lo que mejor hace la realidad virtual es realzar el tipo de emoción cruda que hace que la música sea tan poderosa en primer lugar.

El mejor ejemplo del potencial de la realidad virtual hasta ahora podría ser “Old Friend”, una muy querida pieza del animador Tyler Hurd que se utilizó con una canción de Future Islands del mismo nombre. Te pones los auriculares y a tu alrededor comienza una fiesta escandalosa. Utilizando los controladores HTC Vive y el tracking posicional, tu avatar baila del mismo modo que tú. Hurd estaba haciendo el vídeo para sistemas menos potentes como el Gear VR, pero descubrió la experiencia de cuerpo entero de Vive irresistible. “Tan pronto como empiezas a moverte y a mirar las cosas” dice, “se sienten más reales. Dejas de hacerte preguntar y simplemente te dejas estar allí.” Llama a su vídeo “una abrumadora descarga de alegría sin sentido.” No es un juego ni una historia; es una experiencia, un lugar.