Los festivales de música están creciendo tanto en cantidad como en calidad y cualidad. Incluso en la actual crisis económica son vistos como una oportunidad en las ciudades, debido al impacto económico, social y cultural que generan gracias a su naturaleza y características.
Sin embargo, los festivales no son sólo una forma de entretenimiento y desarrollo económico, potencialmente, son motivadores poderosos de viaje, facilitadores de autoestima colectiva y desarrollo comunitario y, sobre todo, generadores de experiencias auténticas de ocio que pueden facilitar el desarrollo personal y social de las personas.
Para explotar al máximo ese potencial, el rol del gestor de este tipo de eventos es clave, ya que su visión y su forma de gestión influye en la posibilidad de vivir un ocio experiencial memorable y significativo que potencie una vivencia valiosa.
Así, los profesionales se convierten en facilitadores de experiencias, emociones y significados y no sólo productores y organizadores de festivales. Por ello, el conocimiento del perfil actual de los directores respecto a la generación de experiencias de ocio y su desarrollo como gestores experienciales se convierte en un objeto de estudio esencial.
Los resultados que se presentan a continuación son sólo una muestra de la investigación doctoral llevada a cabo entre 2011-2016 [1] que tiene como objetivo analizar el perfil actual del director de festivales de música de Europa respecto a la generación de experiencias de ocio; para así, profesionalizar cada vez más la industria, mejorar su desarrollo y concienciar a instituciones, organizaciones y ciudadanos de su importancia económica, social y personal/individual.
Los festivales no son sólo una forma de entretenimiento y desarrollo económico
Cabe destacar que el contenido de la investigación se inspira y se fundamenta en las aportaciones de la teoría del ocio humanista. Esta teoría entiende el ocio como disfrute, realización e identidad personal y por ello, es antagónico a términos pasados que entendían el ocio como ociosidad, vagancia o vicio; o incluso términos más actuales que lo relacionan exclusivamente con el tiempo libre o descanso del trabajo. Por lo tanto, el ocio humanista va más allá de la perspectiva tradicional y entiende la experiencia de ocio como un aspecto central de la vida, una ocupación elegida libremente, que genera satisfacción y tiene valor en sí mismo. Por ello, el desarrollo humano es un referente básico en la construcción de la misma. En consecuencia, la experiencia de ocio que se menciona en esta investigación se refiere a una experiencia auténtica, memorable y significativa que genera bienestar y bienser en aquellos que lo vivencian debido al desarrollo personal y social que facilita. En este caso a través de los festivales de música.
La experiencia de ocio se refiere a una experiencia auténtica, memorable y significativa que genera bienestar y bienser en aquellos que lo vivencian
Teniendo en cuenta todo ello, a continuación se presentan las características del estudio de caso. Éste se ha realizado al conjunto de directores de festivales europeos que cumplen las siguientes características:
- Son festivales de música en vivo centradas en las llamadas músicas populares (pop, rock, folk, reggae, electrónica, jazz, autor, heavy, funk etc.).
- Son un solo evento bajo un mismo nombre comercial.
- Tienen al menos dos años de antigüedad y su última edición fue hace no más de un año.
- Acuden no menos de 3.000 visitantes por día.
- Actúan no menos de 5 bandas profesionales por día.
- La razón principal del festival es la presentación de música en vivo. No son eventos en apoyo a una determinada política o un objetivo religioso específico.
- Están abiertos públicamente a todo tipo de audiencias.
De todos los festivales que cumplen esas características se han seleccionado aquellos que son líderes en el sector y/o tienen mayor influencia a nivel europeo. Teniendo en cuenta todo ello, el universo de la investigación asciende a 150 festivales que pertenecen a 30 países diferentes de Europa. Los resultados de los cuestionarios, entrevistas y grupos de discusión realizados pertenecen al 30% de todos ellos y abarcan las diferentes zonas europeas que se pueden observar en el mapa.
Los resultados muestran que los festivales líderes en la actualidad suelen ser macrofestivales (aquellos con una capacidad de 30.000 asistentes diarios), con menos de 10 ediciones celebradas, con una titularidad privada con ánimo de lucro, una estructura organizativa permanente y basada en beneficios directos (venta de entradas y productos dentro del festival). Los responsables en dirigirlas suelen ser hombres de entre 36 y 40 años del oeste o centro de Europa con menos de 20 años de experiencia en el cargo, con estudios en áreas relacionadas con las Ciencias Sociales y un posgrado universitario. El detalle de estos resultados se presenta en la siguiente infografía [2]:
[1] La tesis se titula GENERACIÓN DE EXPERIENCIAS DE OCIO EN LOS FESTIVALES DE MÚSICA. Se puede consultar en su totalidad en la base de datos de Teseo del Ministerio de Educación, Cultura y Deporte, así como en Proquest.
[2] Para asegurarse que los resultados son representativos del universo de directores de festivales europeos, se ha realizado una comparación entre las respuestas recibidas y el universo atendiendo a criterios geográficos y de relevancia. De esta forma, se puede asegurar que los resultados son representativos de la realidad investigada, así como fiables en el análisis llevado a cabo.