El líder de Duran Duran, Simon LeBon, dice que el streaming de música está matando a toda una generación de artistas.
En una nueva entrevista con NME, LeBon habló con franqueza sobre cómo el modelo de pago por streaming desanimará a los músicos de perseguir su pasión como profesión a tiempo completo.
«Los artistas necesitan que se les pague adecuadamente por la música que se transmite – de ahí es de donde debería provenir el dinero», dice LeBon en la entrevista con NME. “¿Qué obtienen los artistas? Es como dos décimas de centavo por transmisión, y eso no es solo para los artistas. Un porcentaje de eso también irá a la compañía discográfica, que luego no se lo dará a los artistas. Se lo darán a las personas que consideren los artistas más exitosos».
«Es tan injusto y está tan mal; la idea de que la gente pueda gastar nueve libras al mes y escuchar música ilimitada me preocupa para empezar porque devalúa la música grabada», continúa LeBon. “El efecto real y práctico es que las nuevas bandas no pueden ganar dinero a menos que toquen en vivo, y durante una pandemia, nadie ha podido hacer eso. Va a haber un hueco en la generación».
El líder de Duran Duran, Simon LeBon, no es el único artista que se hace eco de este sentimiento de que el streaming está matando a los artistas.
El líder de Elbow, Guy Garvey, le dijo a la BBC el año pasado que el streaming de música está amenazando el futuro de la música, haciéndose eco del sentimiento de LeBon. «Eso suena muy dramático, pero si los músicos no pueden pagar el alquiler, no tenemos la música del mañana en su lugar».
Nadine Shah también testificó en el Comité DCMS, hablando en nombre de sus compañeros músicos. Dijo a los reguladores que hablaba en su nombre «porque no queremos perder el favor de las plataformas de streaming y las grandes discográficas».
Eso es porque todo el dinero se paga a los titulares de los derechos, quienes luego reparten el bote de acuerdo con los porcentajes. La BBC informa que los artistas discográficos solo reciben alrededor del 13% de los ingresos que generan, y que los sellos y las editoriales se quedan con el resto. El 13% de 0,003 dólares por stream no les paga a los artistas lo suficiente para seguir haciendo música.
Parte de este desperdicio se puede atribuir a contratos arcaicos, según Tom Gray de la banda Gomez. Los principales acuerdos de sellos discográficos todavía tienen cláusulas para cubrir la venta física de vinilos y CD. Eso significa que se pueden deducir hasta el 10% de las regalías de un artista, a pesar de la mayor parte de la transmisión de música en estos días.
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