ᐈ Nueva Orquesta Sinfónica

La crítica musical Julia Hristova fundó la Nueva Orquesta Sinfónica en 1991 como una alternativa a las instituciones musicales existentes financiadas y controladas por el estado. Durante los años transcurridos desde su fundación, la Nueva Orquesta Sinfónica ha producido un modelo cultural propio y ha creado una Sociedad de Amigos, dedicada al bienestar de esta institución cultural, única en Bulgaria.

La Casa de Conciertos de Julia Hristova, inaugurada en 1990, sirvió de base sobre la que se fundó la Orquesta. Esta casa tenía su propio sistema único para organizar y financiar la orquesta y trabajar con sus jóvenes músicos. Según las palabras de su fundadora, Julia Hristova, «Trabajamos no para sobrevivir sino para crear».

Desde el principio, la idea de la Nueva Orquesta Sinfónica era ser una escuela y una institución que cuidara de músicos jóvenes y talentosos que no tenían experiencia en los escenarios de las salas de conciertos, pero que tenían el fuerte deseo de trabajar y perfeccionarlos.

Más de ochocientos músicos de una edad media de entre 18 y 27 años han tocado para la Orquesta. Músicos de la Escuela de la Nueva Orquesta Sinfónica son ahora miembros de las mayores instituciones orquestales y teatros de ópera búlgaros, y de orquestas en los Estados Unidos, América Latina, Sudáfrica, Europa Occidental y Central.

Los principios rectores en el trabajo con los músicos jóvenes, la mayoría de los cuales todavía son estudiantes, es el respeto por las opiniones personales, la igualdad de oportunidades y la flexibilidad en el sistema de trabajo. Según Julia Hristova «El objetivo más importante de nuestro trabajo no es el concierto, sino el amor en el proceso de ‘hacer’ música».

No solo el nuevo método de trabajo con los músicos y la alta calidad de los programas, sino también su estructura organizativa, sistema de gestión y financiamiento hacen que la Nueva Orquesta Sinfónica sea única en este país. Más de 50 jóvenes profesionales han superado una práctica de Gestión del Arte en la administración de la Orquesta.

En los diez años transcurridos desde su fundación la Nueva Orquesta Sinfónica ha logrado establecer un método independiente de financiación y gestión de una prestigiosa institución musical a través de aportaciones voluntarias anuales al llamado «Fondo Anual». Los miembros del Fondo son personas físicas y jurídicas que, según el tamaño de sus contribuciones, disfrutan de diversos privilegios.

La más importante y valiosa de ellas es la posibilidad de incorporarse a la Sociedad de la Nueva Orquesta Sinfónica. La orquesta está gobernada por una Junta Directiva. Sus miembros son personas de prestigio y posición especial en la sociedad.

La reacción de los expertos a la Orquesta cuando se fundó en 1991 fue al principio contradictoria, pero pronto cambió y la crítica comenzó a hablar sobre «El fenómeno de la Nueva Orquesta Sinfónica» (el periódico «Standart»).

Durante sus vigésimas temporadas, esta orquesta de jóvenes músicos ha contado con 238 artistas invitados procedentes de todas partes del mundo. Entre ellos se encontraban los directores Kenneth Kiseler, Jose de Eusebio, Georgi Dimitrov, Dimitar Manolov, Fabrizio Ventura, Dragomir Yossifov, Ivan Kozhuharov, Vassil Kazandjiev, Metodi Matakiev y los solistas Margarita Lilova, Alexandrina Pendachanska, Sigmund Nimsgervn, Vadim Brodschevki Manuelyan, Movses Pogosyan, Georgi Tilev, Pavel Berman, Ivan Drenikov, Gina Tabakova, Luydmil angelov, Dimo Dimov, Boyan Vodenicharov, Stanimir Todorov, Krasimira Stoyanova, Liviu Prunaru, Lora Chekoratova, Mariana Karpatova, Steven Coups Darvarova, Lauren Anna Stoycheva, Mila Gueorgieva, Jennifer Michalef, Glen Inanga, John Koen, Borislav Yotzov, Gretchen van Hosen, Edelina Kaneva, Plamen Beykov, Miguel Angel Rodrigues Lais, Ignat Solzhenitsyn, Liudmil Angelov, Vesko Eshkenazi, Gwyneth Goto, Leonu McCain , Nicholas Daniel, Michael Ludwig, Christina Ortiz, Yossiff Ivanov.

De esta manera la Nueva Orquesta Sinfónica se convirtió en un centro de alta profesionalidad, lo que ha demostrado que «no hay que emigrar para estar en el ancho mundo».

El primer director musical de la Orquesta fue Aleksey Izmirliev, bajo su dirección la Orquesta emprendió su primera gira al extranjero en 1992. Después de él, el puesto de director musical fue asumido por el italiano Eraldo Salmieri. A partir de 1996 la orquesta tiene la oportunidad de ser líder de uno de los directores de orquesta más talentosos de nuestros días: el maestro Rossen Milanov.

Al principio, el primer violinista de la orquesta fue Vesselin Demirev (ahora profesor de la Universidad de Dallas). Después de él, los primeros violinistas de la Nueva Orquesta Sinfónica fueron los rumanos Anka Shain, Daniel Dimov, Martin Mantaleev, Emil Chakalov, Eli Karamfilova, Evelina Encheva, Ivan Vuglarov, Rumyana Yankova. Desde 2003 la concertino es Dora Kehayova.

Desde el principio, el programa musical de la Orquesta ha representado una combinación entre obras clásicas populares con obras desconocidas o que rara vez se tocan en Bulgaria. El repertorio variado y la organización flexible, desde un conjunto de música de cámara hasta una orquesta completa, ha hecho posible que la Nueva Orquesta Sinfónica se gane una posición de respeto en la vida cultural del país.

Ha ofrecido más de 305 conciertos en cuyos programas se incluyeron las obras de más de 180 compositores, 40 de los cuales se interpretaron por primera vez en Bulgaria. La Orquesta ha realizado muchos discos en vivo y de estudio. La mayoría de sus conciertos han sido grabados y retransmitidos por la televisión nacional de Bulgaria.

<strong>Web Oficial de la Orquesta >></strong>