Primero fueron los 8-pistas, después los cassettes, después los compact discs y ahora, es lo digital. Y por un largo período parecía que los avances auditivos digitales iban a acabar totalmente con el vinilo, quizás la forma de descubrimiento de contenido musical más potente, trascendente y que más cambió las reglas del juego hasta la fecha.
Pero por la continua demanda de los aficionados a la música que se deleitan con el álbum de gran formato, tanto como la oleada que rodea al Record Store Day, que por si no lo sabías también está en España, el vinilo se mantiene como una manera viable para que los fans de la música escuchen discos nuevos y antiguos.
De hecho, las ventas de vinilos están creciendo con rapidez. De acuerdo con Nielsen, las ventas de álbumes de vinilo en Estados Unidos han crecido un 260% desde 2009.
Y el constante aumento en el crecimiento no está mostrando signos de parar.
El año pasado, las ventas por unidad de vinilo se totalizaron en 9.2 millones, más que los 6.1 millones de 2013. Y las ventas de discos entre enero y marzo de este año fueron un 53% más altas que durante ese mismo período el año anterior, impulsados por un 66% de crecimiento en las ventas de álbum por catálogo (lanzados al menos 18 meses antes) durante el mismo período.
Pero no son sólo los dioses del rock clásico los que están viendo alzarse las ventas de vinilos. Las ventas de lanzamientos actuales en vinilo han aumentado un 37% en los primeros tres meses de este año.
¿Cuál es el éxito de ventas en vinilo?
Mirando las ventas de LPs desde 2010, vemos una mezcla diversa de ofertas de vinilos nuevos y de catálogo, pero una cosa permanece sobre los artistas que más venden: en esa mezcla hay algo para todo el mundo.
(Fuente: «Thanks to strong sales, vynil albums are off and spinning», Nielsen.com)