¡Situación inestable en las salas de conciertos! ¡Ayuda!
La situación que estamos viviendo las salas de conciertos nos tiene sumamente ahogados y probablemente muchas de nosotras nos veremos obligadas a cerrar definitivamente, con el daño que eso va a suponer a la cultura de base, ya que cuando una sala de conciertos cierra, rara vez un emprendedor intenta seguir apostando por la cultura.
Y más en estos tiempos que por algunas decisiones políticas se mezcla CULTURA con «ocio nocturno», que curiosamente se le llama así aunque la mayoría de licencias que ha secuestrado la Generalitat con las recientes medidas, tienen fijado su horario de apertura a las 12:00h o 17:00h.
¡Hacemos esto gritando auxilio! En estos tiempos tan duros tenemos que agradecer la atención, la sensibilidad y el apoyo que hemos recibido de vosotros y vosotras, quienes disfrutáis de música en directo y la mantenéis viva desde su base, ¡las salvaguardas del ocio cultural! Ahora necesitamos otro pequeño empujón.
Esta vez la petición que os hacemos es para que nos ayudéis a difundir nuestra situación que va a la deriva en un mar de legislaciones y redacciones con ambigüedades, y no está claro que podamos seguir trabajando.
Estos últimos días, habréis leído en los medios de comunicación que el Senado acaba de aprobar una declaración institucional en la que se pide al Gobierno que la cultura sea considerada también como bien esencial al ser una actividad tan necesaria para el fortalecimiento de la sociedad como otras actividades que sí han estado protegidas durante la crisis de la Covid-19.
Esta declaración institucional fue presentada y aprobada por todos los grupos parlamentarios. Desde el Senado se ha recordado que la cultura ha jugado un “papel esencial en la recuperación” de España. Se calcula que unas 700.000 familias viven del sector cultural, lo que supone un 3,6% del empleo total y que aporta el 3,2% del PIB español.
Por otra parte y también presente en todos los medios de comunicación, el ministro de Cultura y Deportes, José Manuel Rodríguez Uribes en su reciente reunión de trabajo con los consejeros y consejeras de Cultura de las Comunidades Autónomas y la FEMP ha pedido a las CCAA que se planteen reconocer las salas de conciertos como lugares de cultura y no de ocio nocturno equiparables a otros espacios culturales. Además Rodríguez Uribes ha compartido con las CCAA y los ayuntamientos la necesidad de poner en marcha una campaña de apoyo a la cultura segura.
Sin embargo, y a pesar de estas esperanzadoras noticias, las salas de conciertos siguen cerradas en su gran mayoría desde el 14 de marzo pagando todos sus gastos fijos y asumiendo suministros y tasas municipales aun teniendo cerradas sus puertas y no poder ejercer actividad alguna por decreto. Todos estos desembolsos gracias a sus propios ahorros, ya agotados o a través de créditos que tendrán lógicamente que devolver.
Con el máximo respeto en el cumplimiento de todos los protocolos sanitarios y de distancia social, las salas de conciertos son lugares seguros. No nos confundan con fiestas incontroladas que desgraciadamente nos han hecho un daño irreparable. Somos profesionales de la cultura y los primeros en apoyar cualquier sanción a aquellos espacios que no cumplan con los protocolos.
Esto es una auténtica llamada de emergencia. La situación es ya insostenible, y a la espera de un plan de rescate, las salas de conciertos necesitan volver a la actividad si no, van a desaparecer en muy poco tiempo sin contar con aquellas que jamás volverán ya a levantar el cierre.
La Generalitat es consciente de esta situación y desde el Instituto Valenciano de Cultura han certificado que a pesar de lo que ponga en nuestras licencias de apertura, somos salas de programación estable, profesional y de calidad. Por otro lado, desde el Consell de Sanidad modifican la ley de 19 de junio, sobre medidas de prevención frente al Covid-19 con el fin de incluir la legislación aplicable a las salas de conciertos.
A priori todo genial, salvo por la inexactitud de los términos y las faltas de competencias de unos y otros para autorizar nuestra apertura al público. En resumen se podría indexar de la siguiente manera:
– Nuestras licencias de aperturas públicas están catalogadas como «Ocio y Entretenimiento», aunque hay quien se empeña en decir que se llaman “Ocio Nocturno”, y cerrada toda actividad en la resolución del Consell de Sanidad.
Por lo tanto, ante una inspección de la autoridad autonómica seremos sancionados si abrimos nuestras instalaciones, da igual que tengamos acreditada por el IVC el reconocimiento cultural. Sin ir más lejos, hay salas que están siendo cerradas indebidamente, ya que tienen licencias de café concierto y éstas no están ligadas al sector del ocio, no obstante se ha actuado contra ellas.
Y desgraciadamente esto sucede por la falta de claridad en la redacción de los términos de aplicación.
– Esta situación se la expusimos a Ia Secretaría Autonómica de Salud Pública y del Sistema Sanitario Público y en su respuesta nos indica que nos autoriza la actividad musical pero sin servicio de BAR y nos remite al cumplimiento del punto 3.7 sobre medidas relativas a las actividades y equipamientos culturales.
Resulta, que con la ley en la mano, el servicio de BAR nunca ha sido aplicable a nuestra actividad, nosotros trabajamos con SERVICIO DE BEBIDAS, que es diferente a la actividad de BAR, de hecho son licencias distintas en epígrafes distintos. Además, en el citado artículo 3.7 de las medidas relativas no hay ninguna restricción al respecto sobre la actividad hostelera, de hecho se sigue pudiendo ir al cine bebiendo y comiendo, por lo tanto si una sala de conciertos tiene reconocida la actividad de servicio de bebidas y cumple con los protocolos sanitarios podrá continuar haciéndolo.
Por lo tanto se está extendiendo el rumor de que no podemos servir bebidas si abrimos para conciertos, cuando no se sostiene legalmente en ningún texto. Y para colmo, como bien citamos antes, no está claro que podamos abrir para ninguna actividad.
Por lo tanto, tenemos que pedir que nos ayudéis a resolver esta situación y que seáis partícipes de nuestras peticiones, necesitamos un marco legal para poder trabajar con garantías, y sobre todo no sufrir también el cierre del servicio de bebidas o nuestra situación es del todo insostenible.
Tenéis que valorar que los aforos de nuestras salas son muy reducidos, que aunque se indique que se puede aforar al 75% para nosotros es imposible, nuestros aforos se calculan con público en pie, y contando entre 2 y 4 personas por m2 según licencias; ahora al tener que instalar sillas y pasillos el aforo medio resultante es del 26% de la ocupación, un ratio nada alarmante desde el punto de vista de la transmisión del virus.
Con esos aforos, la viabilidad económica del concierto resulta IMPOSIBLE, si a eso le sumamos que la única vía de ingresos del organizador es la venta de entradas solo tenemos 2 soluciones, o nuestra actividad es subvencionada al 100% o las entradas tendrían que aumentar muchísimo su precio, creando el precedente de que la cultura queda relegada a las élites sociales con mayor poder adquisitivo, algo que desde nuestro punto de vista es totalmente contrario a cómo debe ser la cultura de nuestro territorio.
Tened en cuenta que las salas de conciertos sufragamos gran parte de los gastos de nuestros bolsillo, y nos vemos obligados a llenar esos bolsillos con la actividad complementaria de servicio de bebidas antes, durante y después del concierto.
Estamos dispuestos a someternos a limitaciones horarias de actividad, pero el cierre total actual, aunque podamos abrir solo para un concierto, nos condena a la quiebra antes de finalizar el año. Actualmente prácticamente ninguna sala está programando.
¿Qué os pedimos concretamente?
Instar al gobierno que legislen nuestro sector con EQUIDAD, como puede ser la siguiente medida que acabaría con todas las contradicciones legislativas que estamos sufriendo, que por poner un ejemplo, actualmente este gobierno está permitiendo los salones de juego y apuestas en vez de las salas de música en directo, en términos objetivos podríamos decir que se apoya más la ludopatía que la cultura, algo paradójico e inquietante. Por lo tanto debemos exigir:
– Permitir el «Ocio Cultural», habilitando la total actividad de los epígrafes concretos relacionados con la música en directo detalladas en la Ley 14/2010 (y su subsanación Ley 6/2018), de 3 de diciembre, de espectáculos públicos, actividades recreativas y establecimientos públicos, legislando en equidad con los otros epígrafes, aplicando reducciones de aforo, horario de aperturas, con protocolos de actuación y medidas de prevención frente al Covid-19, en vez del cierre total que tenemos vigente.
– Comunicar dicha resolución públicamente y a todas las instituciones para el correcto desarrollo de la actividad.
Muchísimas gracias una vez más por vuestra atención, como veis no pedimos ninguna locura, creemos que en estos tiempos la equidad tendría que ser algo que no tendría que exigirse, pero en esta situación nos encontramos.
La idea es que esta petición les llegue con fuerza a nuestros dirigentes, y dado que la organización de manifestaciones cada vez es más complicada, una buena manera de hacerlo sería por mail o registro electrónico a vuestro Ayuntamiento con el fin que el tema se trate en sesión plenaria.
O bien directamente a los que mandan, aquí están sus direcciones: sec.pre@gva.es, barcelo_anachi@gva.es, oltra_monica@gva.es, marza_vicent@gva.es, docus_pre@gva.es, secre_transparencia@gva.es
Y sobre todo, ¡compartid esta protesta!
#AniràBéSiHoFemBé #ApoyaTuSala #CulturaSegura
Sobre En Viu
Beneficios del asociado:
- Convenio especial de descuentos con la SGAE (5% de deducción de las tarifas generales de la SGAE por estar adherido a este convenio. Los conciertos cuyo precio sean igual o inferior a 12€, estarán incluidos dentro de las obras de pequeño derecho. 5% de deducción de la tarifa si se domicilia su pago mensual. 5% de deducción si se envía la programación de la sala con un mes de antelación.)
- Protección jurídica y moral.
- Participación de la sala en el GPS (Girando Por Salas), gira de conciertos subencionados por el INAEM.
- Participación de la sala del “Artistas en ruta”, organizado por el AIE.
- Un concierto por comunidad autónoma el dia de la Música, organizado por el INAEM.