Somos tribales por naturaleza. Como tal, creo que habrá un movimiento continuo hacia las comunidades con intereses comunes que alimentan nuestra necesidad innata de contar historias y comunicarnos en grupo. Esto incluye grupos de Facebook, grupos de LinkedIn, grupos en comunidades de Pinterest y Google+. Los Hashtags también continuarán brillando en Instagram y Twitter como una manera en la que reivindicamos nuestro derecho a un tema o nicho y a construir comunidad de contenido en torno a un tema.
Al establecer un grupo en cualquiera de estas plataformas, tanto fundadores/administradores y personas que se unen al grupo, en realidad lo que quieren es encontrarse. Estamos buscando conversaciones sobre intereses mutuos. Buscamos encontrar contenido en un lugar donde no somos distraídos con otro tipo de noticias (ej. News feed).
No es de extrañar que muchas empresas estén reportando los beneficios de establecer un grupo de Facebook separada de su página de Facebook. Como los anuncios pagados se convierten en una necesidad para ser vistos en Facebook, la popularidad de grupos aporta un grado de control sobre el contenido que compartimos y cómo nos comunicamos unos con otros.
En mi experiencia, las mejores comunidades son las que se centran en el intercambio de contenido y en ayudarse unos a otros en vez de ser acerca de la promoción unidireccional. Si se construye la confianza enfocado a ser alguien que une y guía a las personas y que les permite compartir y apoyarse mutuamente, podrás construir relaciones con las personas que más le importan a tu negocio, sin dar «alcance» a un segundo pensamiento.
Donna Moritz, fundadora de Socially Sorted.