Soy un pobre pastorcillo
que camina hacia Belén;
voy buscando al que ha nacido:
Dios con nosotros, Manuel.
Caminando, camina ligero,
no te canses, no, de caminar,
que te esperan José y María
con el niño en el portal,
que te esperan José y María
con el niño en el portal.
Como soy pobre, le llevo
un blanquísimo vellón
para que le haga su madre
un pellico de pastor,
para que le haga su madre
un pellico de pastor.
Caminando, camina ligero,
no te canses, no, de caminar,
que te esperan José y María
con el niño en el portal,
que te esperan José y María
con el niño en el portal.