Si recuerdas, no hace mucho, el 2015 fue el año de la expansión del streaming hacia los mercados globales (luego de ya haber llegado a Corea del Sur y a los Países Bajos, claro está). En el Reino Unido y en Estados Unidos el streaming ha tenido un crecimiento del 85% y 93% respectivamente.
Dichos mercados son de importancia porque representan al 1º y 4º mercado más importante de la industria musical y juntos suponen el 40% de las ganancias globales. Sin embargo, aunque estas cifras suenen muy prometedoras, los grandes ganadores no son Spotify, Deezer ni Apple Music, el gran ganador es YouTube…
En ambos países, YouTube tuvo un mayor crecimiento que las otras empresas mencionadas. Tomando en cuenta que YouTube le genera menos ganancias por streams a los autores que los prestadores de servicios «freemium», no hay duda de por qué las discográficas sienten una crisis de identidad en cuanto a YouTube, y YouTube se ha vuelto un destino obligatorio en la odisea del consumismo musical. La campaña publicitaria se ha convertido en un producto, ya que YouTube no solo está superando a los «pure plays», sino que está creciendo en extremo gracias a su propia generación de creadores de contenido:Los YouTubers.
YouTube comenzó como una simple página para ver y subir vídeos, pero ha evolucionado en una plataforma de entretenimiento muy sofisticada que se presta para cualquier tipo de usos, ya sea en términos de contenido o audiencia. Este modelo se puede apreciar mas que todo en las suscripciones a canales específicos, aunque en muchos casos, la palabra «canal» no es la definición mas correcta para este tipo de espacios llenos de talento ya que no tienen nada que ver con los canales de TV convencionales. Sin embargo, estas personas se han convertido en personales exclusivos de YouTube, como Michelle Phan, PewDiePie, Zoella, SMOSH, stampylongnose y llSuperwomanll.
Estas personas con creadores de contenido, los cuales generalmente hacen de todo, desde escribir, filmar, producir, editar… y todo esto al frente de una cámara, y se están convirtiendo en la energía vital de YouTube de una manera muy rápida. De los 330 millones de suscriptores en los primeros 50 canales de YouTube, el 34% es para los YouTubers, en contraste con el 15% para canales de música y discográficas, a pesar del gran desenvolvimiento que han tenido artistas como Adele y Justin Bieber en estos pasados meses, los cantantes perdieron la batalla en cuanto a suscriptores se refiere, solo obteniendo un 31% de los suscriptores, comparado con el 53% obtenido por los YouTubers (en los últimos 90 días).
La Industria Musical está perdiendo la batalla en contra de los YouTubers
Los vídeos musicales tienen muchas visitas en YouTube (36% de los 41.000 millones de visitas en los principales 50 canales los 90 días pasados), sin embargo, quedan de segundo lugar gracias a que los YouTubers acumularon el 45% de las mismas, y esto solo demuestra la tendencia que se está siguiendo. En los 90 días pasados, 42% de los 50 canales con mayor crecimiento en YouTube son de YouTubers, comparado con el 39% de la industria musical. Puede parecer una diferencia bastante modesta, pero solo estamos hablando de los últimos 90 días, y la historia es bastante larga. La música solía ser el punto focal de YouTube pero eso ha ido cambiando a través del tiempo. En términos de visitas a lo largo de la historia, la música ha tenido un 42% y los YouTubers un 41%, pero eso está cambiando a medida que pasa el tiempo.
Solo hay algo que es seguro: los vídeos están popularizándose rápidamente y la música siempre ha sido el mayor contribuyente a dicha ecuación.
Es hora de dejar de utilizar YouTube como si fuéramos niños de primaria
Las compañías discográficas pueden mejorar su estrategia y empezar a utilizar a YouTube como la plataforma de publicidad que es, sin embargo, lo que funcionaba en el YouTube del 2010, no va a funcionar en el YouTube del 2017… La nuevas compañías están utilizando la plataforma como si fueran niños de primaria utilizando su Instagram, llenándolo de vanidades y obsesionándose con las visitas, en vez de pensar en crear relaciones duraderas con las audiencias del sitio. Hay una generación emergente de artistas que ha creado y alimentado a su audiencia den YouTube con muy poca o nada de ayuda de sus discográficas. Artistas como Dave Dys, Tyler Ward, Boyce Avenue y Hannah Trigwell, los cuales han creado una fanbase en YouTube, generalmente mediante covers de otras canciones o parodias, vlogs u otro tipo de vídeos no relacionados con la música. Estos artistas se han criado en YouTube y saben como manejar a sus audiencias.
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Si los grandes artistas chapados a la antigua quieren empezar a ganar espacio en la nueva generación de YouTube, tienen que tomar consejo de las nueva generaciones de artistas de dicha plataforma.
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