Dentro del panorama de cifras que maneja Spotify tenemos que cuenta con 20 millones de usuarios de pago aunque solo un porcentaje está pagando los 9,99$ y por otro lado tenemos a 55 millones de usuarios gratuitos.
Situación que según Mark Mulligan, uno de los analistas más brillantes de la industria de la música, no muestra que el crecimiento orgánico esté creciendo lo suficientemente rápido en una reciente investigación señalando como excepción la tasa de corte en cuanto a precios.
¿Por qué no son mejores esos números?
Mulligan cree que una parte importante del problema es que el consumidor medio, simplemente no se preocupa por vastos catálogos y enorme selecciones, y en definitiva, no estamos dispuestos a pagar por ello. Lo que evidenciaría que la mayoría de la gente no está interesada en toda la música en el mundo ni en gastarse los 9,99 al mes por la música.
«…sólo el 5% de los catálogos de streaming se frecuenta regularmente. La mayor parte del resto del catálogo es irrelevante para la mayoría de los consumidores «.
Sugiere además dejar caer el precio para aumentar el atractivo del streaming, algo a lo que la industria se ha resistido con firmeza. Sin embargo, el rendimiento podrían ser enorme para los servicios de nicho a un menor tamaño como por ejemplo servicios a 3 ò 4 dólares de listas de reproducción curadas, algunos álbumes destacados y un par de estaciones de radio, todo del estilo favorito de música del usuario en concreto.
También se pueden encontrar investigaciones que sugieren que los suscriptores existentes están dispuestos a pagar más por el streaming, pero no se refiere precisamente a los usuarios free.
Mark, comenta que va a ser crucial para desbloquear el final de la escala del mercado de suscripción y serán necesarios más pronto que tarde.
» En el primer trimestre de 2015, las reproducciones de streaming de video (en YouTube) fué más del doble que las reproducciones de streaming de audio»
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